LECTURA PARA LA MAÑANA
MATEO 25:1-13
Mat 25:1 »Entonces, el reino del cielo será como diez damas de honor* que tomaron sus lámparas y salieron para encontrarse con el novio.
Mat 25:2 Cinco de ellas eran necias y cinco sabias.
Mat 25:3 Las cinco que eran necias no llevaron suficiente aceite de oliva para sus lámparas,
Mat 25:4 pero las otras cinco fueron tan sabias que llevaron aceite extra.
Mat 25:5 Como el novio se demoró, a todas les dio sueño y se durmieron.
Mat 25:6 »A la medianoche, se despertaron ante el grito de: “¡Miren, ya viene el novio! ¡Salgan a recibirlo!”.
Mat 25:7 »Todas las damas de honor se levantaron y prepararon sus lámparas.
Mat 25:8 Entonces las cinco necias les pidieron a las otras: “Por favor, dennos un poco de aceite, porque nuestras lámparas se están apagando”.
Mat 25:9 »Pero las sabias contestaron: “No tenemos suficiente para todas. Vayan a una tienda y compren un poco para ustedes”.
Mat 25:10 »Pero, durante el lapso en que se fueron a comprar aceite, llegó el novio. Entonces las que estaban listas entraron con él a la fiesta de bodas y se cerró la puerta con llave.
Mat 25:11 Más tarde, cuando regresaron las otras cinco damas de honor, se quedaron afuera, y llamaron: “¡Señor, Señor! ¡Ábrenos la puerta!”.
Mat 25:12 »Pero él les respondió: “Créanme, ¡no las conozco!”.
Mat 25:13 »¡Así que ustedes también deben estar alerta! Porque no saben el día ni la hora de mi regreso.
Mat 25:2 Cinco de ellas eran necias y cinco sabias.
Mat 25:3 Las cinco que eran necias no llevaron suficiente aceite de oliva para sus lámparas,
Mat 25:4 pero las otras cinco fueron tan sabias que llevaron aceite extra.
Mat 25:5 Como el novio se demoró, a todas les dio sueño y se durmieron.
Mat 25:6 »A la medianoche, se despertaron ante el grito de: “¡Miren, ya viene el novio! ¡Salgan a recibirlo!”.
Mat 25:7 »Todas las damas de honor se levantaron y prepararon sus lámparas.
Mat 25:8 Entonces las cinco necias les pidieron a las otras: “Por favor, dennos un poco de aceite, porque nuestras lámparas se están apagando”.
Mat 25:9 »Pero las sabias contestaron: “No tenemos suficiente para todas. Vayan a una tienda y compren un poco para ustedes”.
Mat 25:10 »Pero, durante el lapso en que se fueron a comprar aceite, llegó el novio. Entonces las que estaban listas entraron con él a la fiesta de bodas y se cerró la puerta con llave.
Mat 25:11 Más tarde, cuando regresaron las otras cinco damas de honor, se quedaron afuera, y llamaron: “¡Señor, Señor! ¡Ábrenos la puerta!”.
Mat 25:12 »Pero él les respondió: “Créanme, ¡no las conozco!”.
Mat 25:13 »¡Así que ustedes también deben estar alerta! Porque no saben el día ni la hora de mi regreso.
ROMANOS 8:1-17
Rom 8:1 Por lo tanto, ya no hay condenación para los que pertenecen a Cristo Jesús.
Rom 8:2 Y, porque ustedes pertenecen a él, el poder* del Espíritu que da vida los* ha libertado del poder del pecado, que lleva a la muerte.
Rom 8:3 La ley de Moisés no podía salvarnos, porque nuestra naturaleza pecaminosa* es débil. Así que Dios hizo lo que la ley no podía hacer. Él envió a su propio Hijo en un cuerpo como el que tenemos nosotros, pecadores. Y, en ese cuerpo, Dios declaró el fin del dominio que el pecado tenía sobre nosotros mediante la entrega de su Hijo como sacrificio por nuestros pecados.
Rom 8:4 Lo hizo para que se cumpliera totalmente la exigencia justa de la ley a favor de nosotros, que ya no seguimos a nuestra naturaleza pecaminosa sino que seguimos al Espíritu.
Rom 8:5 Los que están dominados por la naturaleza pecaminosa piensan en cosas pecaminosas, pero los que son controlados por el Espíritu Santo piensan en las cosas que agradan al Espíritu.
Rom 8:6 Por lo tanto, permitir que la naturaleza pecaminosa les controle la mente lleva a la muerte. Pero permitir que el Espíritu les controle la mente lleva a la vida y a la paz.
Rom 8:7 Pues la naturaleza pecaminosa es enemiga de Dios siempre. Nunca obedeció las leyes de Dios y jamás lo hará.
Rom 8:8 Por eso, los que todavía viven bajo el dominio de la naturaleza pecaminosa nunca pueden agradar a Dios.
Rom 8:9 Pero ustedes no están dominados por su naturaleza pecaminosa. Son controlados por el Espíritu si el Espíritu de Dios vive en ustedes. (Y recuerden que los que no tienen al Espíritu de Cristo en ellos, de ninguna manera pertenecen a él).
Rom 8:10 Y Cristo vive en ustedes; entonces, aunque el cuerpo morirá por causa del pecado, el Espíritu les da vida,* porque ustedes ya fueron declarados justos a los ojos de Dios.
Rom 8:11 El Espíritu de Dios, quien levantó a Jesús de los muertos, vive en ustedes. Y, así como Dios levantó a Cristo Jesús de los muertos, él dará vida a sus cuerpos mortales mediante el mismo Espíritu, quien vive en ustedes.
Rom 8:12 Por lo tanto, amados hermanos, no están obligados a hacer lo que su naturaleza pecaminosa los incita a hacer;
Rom 8:13 pues, si viven obedeciéndola, morirán. Pero, si mediante el poder del Espíritu hacen morir las acciones de la naturaleza pecaminosa,* vivirán.
Rom 8:14 Pues todos los que son guiados por el Espíritu de Dios son hijos de Dios.
Rom 8:15 Y ustedes no han recibido un espíritu que los esclavice al miedo. En cambio, recibieron el Espíritu de Dios cuando él los adoptó como sus propios hijos.* Ahora lo llamamos «Abba, Padre»*.
Rom 8:16 Pues su Espíritu se une a nuestro espíritu para confirmar que somos hijos de Dios.
Rom 8:17 Y, como somos sus hijos, también somos sus herederos. De hecho, somos herederos junto con Cristo de la gloria de Dios. Pero, si vamos a participar de su gloria, también debemos participar de su sufrimiento.
Rom 8:2 Y, porque ustedes pertenecen a él, el poder* del Espíritu que da vida los* ha libertado del poder del pecado, que lleva a la muerte.
Rom 8:3 La ley de Moisés no podía salvarnos, porque nuestra naturaleza pecaminosa* es débil. Así que Dios hizo lo que la ley no podía hacer. Él envió a su propio Hijo en un cuerpo como el que tenemos nosotros, pecadores. Y, en ese cuerpo, Dios declaró el fin del dominio que el pecado tenía sobre nosotros mediante la entrega de su Hijo como sacrificio por nuestros pecados.
Rom 8:4 Lo hizo para que se cumpliera totalmente la exigencia justa de la ley a favor de nosotros, que ya no seguimos a nuestra naturaleza pecaminosa sino que seguimos al Espíritu.
Rom 8:5 Los que están dominados por la naturaleza pecaminosa piensan en cosas pecaminosas, pero los que son controlados por el Espíritu Santo piensan en las cosas que agradan al Espíritu.
Rom 8:6 Por lo tanto, permitir que la naturaleza pecaminosa les controle la mente lleva a la muerte. Pero permitir que el Espíritu les controle la mente lleva a la vida y a la paz.
Rom 8:7 Pues la naturaleza pecaminosa es enemiga de Dios siempre. Nunca obedeció las leyes de Dios y jamás lo hará.
Rom 8:8 Por eso, los que todavía viven bajo el dominio de la naturaleza pecaminosa nunca pueden agradar a Dios.
Rom 8:9 Pero ustedes no están dominados por su naturaleza pecaminosa. Son controlados por el Espíritu si el Espíritu de Dios vive en ustedes. (Y recuerden que los que no tienen al Espíritu de Cristo en ellos, de ninguna manera pertenecen a él).
Rom 8:10 Y Cristo vive en ustedes; entonces, aunque el cuerpo morirá por causa del pecado, el Espíritu les da vida,* porque ustedes ya fueron declarados justos a los ojos de Dios.
Rom 8:11 El Espíritu de Dios, quien levantó a Jesús de los muertos, vive en ustedes. Y, así como Dios levantó a Cristo Jesús de los muertos, él dará vida a sus cuerpos mortales mediante el mismo Espíritu, quien vive en ustedes.
Rom 8:12 Por lo tanto, amados hermanos, no están obligados a hacer lo que su naturaleza pecaminosa los incita a hacer;
Rom 8:13 pues, si viven obedeciéndola, morirán. Pero, si mediante el poder del Espíritu hacen morir las acciones de la naturaleza pecaminosa,* vivirán.
Rom 8:14 Pues todos los que son guiados por el Espíritu de Dios son hijos de Dios.
Rom 8:15 Y ustedes no han recibido un espíritu que los esclavice al miedo. En cambio, recibieron el Espíritu de Dios cuando él los adoptó como sus propios hijos.* Ahora lo llamamos «Abba, Padre»*.
Rom 8:16 Pues su Espíritu se une a nuestro espíritu para confirmar que somos hijos de Dios.
Rom 8:17 Y, como somos sus hijos, también somos sus herederos. De hecho, somos herederos junto con Cristo de la gloria de Dios. Pero, si vamos a participar de su gloria, también debemos participar de su sufrimiento.
SALMO 59
Sal 59:1 Rescátame de mis enemigos, oh Dios; protégeme de los que han venido a destruirme.
Sal 59:2 Rescátame de estos criminales; sálvame de estos asesinos.
Sal 59:3 Me han tendido una emboscada. Enemigos feroces están a la espera, SEÑOR, aunque yo no pequé ni los he ofendido.
Sal 59:4 No he hecho nada malo, sin embargo, se preparan para atacarme. ¡Despierta! ¡Mira lo que sucede y ayúdame!
Sal 59:5 Oh, SEÑOR, Dios de los Ejércitos Celestiales, el Dios de Israel, despierta y castiga a esas naciones hostiles; no tengas misericordia de los traidores malvados. Interludio
Sal 59:6 Salen de noche gruñendo como perros feroces mientras merodean por las calles.
Sal 59:7 Escucha la basura que sale de sus bocas; sus palabras cortan como espadas. Dicen con desdén: «Después de todo, ¿quién puede oírnos?».
Sal 59:8 Pero tú SEÑOR, te ríes de ellos; te burlas de las naciones hostiles.
Sal 59:9 Tú eres mi fuerza; espero que me rescates, porque, tú oh Dios, eres mi fortaleza.
Sal 59:10 En su amor inagotable, mi Dios estará a mi lado y me dejará mirar triunfante a todos mis enemigos.
Sal 59:11 No los mates, porque mi pueblo pronto olvida esa clase de lecciones; hazlos tambalear con tu poder y ponlos de rodillas, Oh Señor, escudo nuestro.
Sal 59:12 Debido a las cosas pecaminosas que dicen, y a la maldad que está en sus labios, haz que queden atrapados por su orgullo, por sus maldiciones y por sus mentiras.
Sal 59:13 ¡Destrúyelos en tu enojo! ¡Arrásalos por completo! Entonces todo el mundo sabrá que Dios reina en Israel.* Interludio
Sal 59:14 Mis enemigos salen de noche gruñendo como perros feroces mientras merodean por las calles.
Sal 59:15 Escarban en busca de comida, pero se van a dormir insatisfechos.*
Sal 59:16 En cuanto a mí, yo cantaré de tu poder; cada mañana cantaré con alegría acerca de tu amor inagotable. Pues tú has sido mi refugio, un lugar seguro cuando estoy angustiado.
Sal 59:17 Oh Fortaleza mía, a ti canto alabanzas, porque tú, oh Dios, eres mi refugio, el Dios que me demuestra amor inagotable.
Sal 59:1 Rescátame de mis enemigos, oh Dios; protégeme de los que han venido a destruirme.
Sal 59:2 Rescátame de estos criminales; sálvame de estos asesinos.
Sal 59:3 Me han tendido una emboscada. Enemigos feroces están a la espera, SEÑOR, aunque yo no pequé ni los he ofendido.
Sal 59:4 No he hecho nada malo, sin embargo, se preparan para atacarme. ¡Despierta! ¡Mira lo que sucede y ayúdame!
Sal 59:5 Oh, SEÑOR, Dios de los Ejércitos Celestiales, el Dios de Israel, despierta y castiga a esas naciones hostiles; no tengas misericordia de los traidores malvados. Interludio
Sal 59:6 Salen de noche gruñendo como perros feroces mientras merodean por las calles.
Sal 59:7 Escucha la basura que sale de sus bocas; sus palabras cortan como espadas. Dicen con desdén: «Después de todo, ¿quién puede oírnos?».
Sal 59:8 Pero tú SEÑOR, te ríes de ellos; te burlas de las naciones hostiles.
Sal 59:9 Tú eres mi fuerza; espero que me rescates, porque, tú oh Dios, eres mi fortaleza.
Sal 59:10 En su amor inagotable, mi Dios estará a mi lado y me dejará mirar triunfante a todos mis enemigos.
Sal 59:11 No los mates, porque mi pueblo pronto olvida esa clase de lecciones; hazlos tambalear con tu poder y ponlos de rodillas, Oh Señor, escudo nuestro.
Sal 59:12 Debido a las cosas pecaminosas que dicen, y a la maldad que está en sus labios, haz que queden atrapados por su orgullo, por sus maldiciones y por sus mentiras.
Sal 59:13 ¡Destrúyelos en tu enojo! ¡Arrásalos por completo! Entonces todo el mundo sabrá que Dios reina en Israel.* Interludio
Sal 59:14 Mis enemigos salen de noche gruñendo como perros feroces mientras merodean por las calles.
Sal 59:15 Escarban en busca de comida, pero se van a dormir insatisfechos.*
Sal 59:16 En cuanto a mí, yo cantaré de tu poder; cada mañana cantaré con alegría acerca de tu amor inagotable. Pues tú has sido mi refugio, un lugar seguro cuando estoy angustiado.
Sal 59:17 Oh Fortaleza mía, a ti canto alabanzas, porque tú, oh Dios, eres mi refugio, el Dios que me demuestra amor inagotable.
Sal 59:2 Rescátame de estos criminales; sálvame de estos asesinos.
Sal 59:3 Me han tendido una emboscada. Enemigos feroces están a la espera, SEÑOR, aunque yo no pequé ni los he ofendido.
Sal 59:4 No he hecho nada malo, sin embargo, se preparan para atacarme. ¡Despierta! ¡Mira lo que sucede y ayúdame!
Sal 59:5 Oh, SEÑOR, Dios de los Ejércitos Celestiales, el Dios de Israel, despierta y castiga a esas naciones hostiles; no tengas misericordia de los traidores malvados. Interludio
Sal 59:6 Salen de noche gruñendo como perros feroces mientras merodean por las calles.
Sal 59:7 Escucha la basura que sale de sus bocas; sus palabras cortan como espadas. Dicen con desdén: «Después de todo, ¿quién puede oírnos?».
Sal 59:8 Pero tú SEÑOR, te ríes de ellos; te burlas de las naciones hostiles.
Sal 59:9 Tú eres mi fuerza; espero que me rescates, porque, tú oh Dios, eres mi fortaleza.
Sal 59:10 En su amor inagotable, mi Dios estará a mi lado y me dejará mirar triunfante a todos mis enemigos.
Sal 59:11 No los mates, porque mi pueblo pronto olvida esa clase de lecciones; hazlos tambalear con tu poder y ponlos de rodillas, Oh Señor, escudo nuestro.
Sal 59:12 Debido a las cosas pecaminosas que dicen, y a la maldad que está en sus labios, haz que queden atrapados por su orgullo, por sus maldiciones y por sus mentiras.
Sal 59:13 ¡Destrúyelos en tu enojo! ¡Arrásalos por completo! Entonces todo el mundo sabrá que Dios reina en Israel.* Interludio
Sal 59:14 Mis enemigos salen de noche gruñendo como perros feroces mientras merodean por las calles.
Sal 59:15 Escarban en busca de comida, pero se van a dormir insatisfechos.*
Sal 59:16 En cuanto a mí, yo cantaré de tu poder; cada mañana cantaré con alegría acerca de tu amor inagotable. Pues tú has sido mi refugio, un lugar seguro cuando estoy angustiado.
Sal 59:17 Oh Fortaleza mía, a ti canto alabanzas, porque tú, oh Dios, eres mi refugio, el Dios que me demuestra amor inagotable.
LECTURA PARA LA NOCHE
NÚMEROS 28-30
Núm 28:1 El SEÑOR le dijo a Moisés:
Núm 28:2 «Da al pueblo de Israel estas instrucciones: las ofrendas especiales que ustedes presentan son un aroma agradable para mí; son mi pan. Asegúrense de que sean llevadas en el tiempo indicado y ofrecidas de acuerdo a mis instrucciones.
Núm 28:3 »Dile a los israelitas: esta es la ofrenda especial que deberán presentar al SEÑOR como ofrenda quemada diaria. Ofrezcan dos corderos de un año, que no tengan ningún defecto.
Núm 28:4 Sacrifiquen un cordero por la mañana y otro al atardecer.
Núm 28:5 Con cada cordero entreguen una ofrenda de grano de dos kilos* de harina selecta mezclada con un litro* de aceite puro de olivas prensadas.
Núm 28:6 Esta es la ofrenda quemada habitual, instituida en el monte Sinaí, como ofrenda especial, un aroma agradable al SEÑOR.
Núm 28:7 Junto con la ofrenda quemada presenten la ofrenda líquida apropiada de un litro de bebida fermentada por cada cordero y derrámenla en el Lugar Santo como ofrenda al SEÑOR.
Núm 28:8 Ofrezcan el segundo cordero al atardecer, con la misma ofrenda de grano y ofrenda líquida. También es una ofrenda especial, un aroma agradable al SEÑOR.
Núm 28:9 »En el día de descanso* sacrifiquen dos corderos de un año, sin defecto, junto con una ofrenda de grano de cuatro kilos* de harina selecta humedecida con aceite de oliva y una ofrenda líquida.
Núm 28:10 Esta es la ofrenda quemada que se presentará cada día de descanso, además de la ofrenda quemada habitual y su correspondiente ofrenda líquida.
Núm 28:11 »El primer día de cada mes presenten al SEÑOR una ofrenda quemada adicional de dos becerros, un carnero y siete corderos de un año, todos sin defecto.
Núm 28:12 Estas ofrendas deben ser acompañadas de ofrendas de grano de harina selecta humedecida con aceite de oliva, seis kilos* por cada becerro, cuatro kilos por cada carnero,
Núm 28:13 y dos kilos por cada cordero. Esta ofrenda quemada será especial, un aroma agradable al SEÑOR.
Núm 28:14 Ofrezcan también una ofrenda líquida con cada sacrificio: dos litros* de vino por cada becerro, un litro y medio* por cada carnero y un litro* por cada cordero. Presenten esta ofrenda quemada el primer día de cada mes, durante todo el año.
Núm 28:15 »El primer día de cada mes ofrezcan también al SEÑOR un chivo como sacrificio por el pecado además de la ofrenda quemada habitual y su correspondiente ofrenda líquida.
Núm 28:16 »Deben celebrar la Pascua del SEÑOR el día catorce del primer mes.*
Núm 28:17 El siguiente día —el día quince del mes— se iniciará un festival jubiloso de siete días, pero no comerán pan preparado con levadura.
Núm 28:18 El primer día del festival será un día oficial para celebrar una asamblea santa y no harán ningún trabajo habitual.
Núm 28:19 Como ofrenda especial presenten al SEÑOR una ofrenda quemada: dos becerros, un carnero y siete corderos de un año, todos sin defecto.
Núm 28:20 Estas serán acompañadas de las ofrendas de grano de harina selecta humedecidas con aceite de oliva: seis kilos con cada becerro, cuatro kilos con el carnero,
Núm 28:21 y dos kilos con cada uno de los siete corderos.
Núm 28:22 Ofrezcan también un chivo como ofrenda por el pecado, para purificarse y hacerse justos ante el SEÑOR.*
Núm 28:23 Estas ofrendas las presentarán además de la ofrenda quemada habitual de cada mañana.
Núm 28:24 Este es el procedimiento que deberán seguir —en cada uno de los siete días del festival— cuando preparen la comida que presenten como ofrenda especial, un aroma agradable al SEÑOR. Estas las ofrecerán además de las ofrendas quemadas habituales y de las ofrendas líquidas.
Núm 28:25 El séptimo día del festival será otro día especial para celebrar una asamblea santa, y ese día no harán ningún trabajo habitual.
Núm 28:26 »Durante el Festival de la Cosecha,* cuando presenten al SEÑOR lo primero de su nuevo grano, convoquen un día oficial para una asamblea santa y ese día no harán ningún trabajo habitual.
Núm 28:27 Ese día, presenten una ofrenda quemada especial como un aroma agradable al SEÑOR, compuesta de dos becerros, un carnero y siete corderos de un año.
Núm 28:28 Estas serán acompañadas de las ofrendas de grano de harina selecta humedecidas con aceite de oliva: seis kilos con cada becerro, cuatro kilos con el carnero
Núm 28:29 y dos kilos con cada uno de los siete corderos.
Núm 28:30 Ofrezcan también un chivo para purificarse y hacerse justos ante el SEÑOR.
Núm 28:31 Preparen estas ofrendas quemadas especiales, junto con sus ofrendas líquidas, además de la ofrenda quemada habitual y su correspondiente ofrenda de grano. Asegúrense de que los animales que sacrifiquen no tengan ningún defecto.
Núm 29:1 »Cada año, el primer día del mes señalado, al principio del otoño* , celebren el Festival de las Trompetas. Convoquen un día oficial para una asamblea santa y no hagan ningún trabajo habitual.
Núm 29:2 Ese día deben presentar una ofrenda quemada, como aroma agradable al SEÑOR: un becerro, un carnero y siete corderos de un año, todos sin defecto.
Núm 29:3 Estas deben ser acompañadas de las ofrendas de grano de harina selecta humedecidas con aceite de oliva: seis kilos* con el becerro, cuatro kilos* con el carnero
Núm 29:4 y dos kilos* con cada uno de los siete corderos.
Núm 29:5 Además sacrifiquen un chivo como ofrenda por el pecado, para purificarse y hacerse justos ante el SEÑOR.*
Núm 29:6 Estos sacrificios especiales, junto con sus ofrendas obligatorias de grano y las ofrendas líquidas, son además de las ofrendas quemadas habituales, mensuales y diarias. Se las presenta como ofrenda especial al SEÑOR, aroma agradable a él.
Núm 29:7 »Diez días después, el día diez del mismo mes,* convoquen otra asamblea santa. Ese día, el Día del Perdón, el pueblo no debe comer ni hacer ningún trabajo habitual.
Núm 29:8 Deberán presentar una ofrenda quemada como aroma agradable al SEÑOR: un becerro, un carnero y siete corderos de un año, todos sin defecto.
Núm 29:9 Estas ofrendas deben ser acompañadas por las ofrendas obligatorias de grano de harina selecta humedecidas con aceite de oliva: seis kilos de harina selecta con el becerro, cuatro kilos de harina selecta con el carnero
Núm 29:10 y dos kilos de harina selecta con cada uno de los siete corderos.
Núm 29:11 Sacrifiquen también un chivo como ofrenda por el pecado. Esta es además de la ofrenda por el pecado para el perdón y además de la ofrenda quemada diaria habitual, junto con su ofrenda de grano y sus correspondientes ofrendas líquidas.
Núm 29:12 »Cinco días después, el día quince del mismo mes,* convoquen otra asamblea santa de todo el pueblo y ese día no hagan ningún trabajo habitual. Ese día es el comienzo del Festival de las Enramadas,* un festival de siete días al SEÑOR.
Núm 29:13 El primer día del festival presenten, como ofrenda especial, una ofrenda quemada como aroma agradable al SEÑOR: trece becerros, dos carneros y catorce corderos de un año, todos sin defecto.
Núm 29:14 Cada una de estas ofrendas deben ser acompañadas por una ofrenda de grano de harina selecta humedecida con aceite de oliva: seis kilos para cada uno de los trece becerros, cuatro kilos para cada uno de los dos carneros
Núm 29:15 y dos kilos para cada uno de los catorce corderos.
Núm 29:16 También sacrifiquen un chivo como ofrenda por el pecado además de la ofrenda quemada habitual con su correspondiente ofrenda de grano y ofrenda líquida.
Núm 29:17 »El segundo día de este festival de siete días, sacrifiquen doce becerros, dos carneros y catorce corderos de un año, todos sin defecto.
Núm 29:18 Cada una de estas ofrendas de becerros, carneros y corderos deben ser acompañadas por su ofrenda obligatoria de grano y su ofrenda líquida.
Núm 29:19 También sacrifiquen un chivo como ofrenda por el pecado además de la ofrenda quemada habitual con su correspondiente ofrenda de grano y ofrenda líquida.
Núm 29:20 »El tercer día del festival, sacrifiquen once becerros, dos carneros y catorce corderos de un año, todos sin defecto.
Núm 29:21 Cada una de estas ofrendas de becerros, carneros y corderos deben ser acompañadas por su ofrenda obligatoria de grano y su ofrenda líquida.
Núm 29:22 También sacrifiquen un chivo como ofrenda por el pecado además de la ofrenda quemada habitual con su correspondiente ofrenda de grano y ofrenda líquida.
Núm 29:23 »El cuarto día del festival, sacrifiquen diez becerros, dos carneros y catorce corderos de un año, todos sin defecto.
Núm 29:24 Cada una de estas ofrendas de becerros, carneros y corderos deben ser acompañadas por su ofrenda obligatoria de grano y su ofrenda líquida.
Núm 29:25 También sacrifiquen un chivo como ofrenda por el pecado además de la ofrenda quemada habitual con su correspondiente ofrenda de grano y ofrenda líquida.
Núm 29:26 »El día quinto del festival, sacrifiquen nueve becerros, dos carneros y catorce corderos de un año, todos sin defecto.
Núm 29:27 Cada una de estas ofrendas de becerros, carneros y corderos deben ser acompañadas por su ofrenda obligatoria de grano y su ofrenda líquida.
Núm 29:28 También sacrifiquen un chivo como ofrenda por el pecado además de la ofrenda quemada habitual con su correspondiente ofrenda de grano y ofrenda líquida.
Núm 29:29 »El sexto día del festival, sacrifiquen ocho becerros, dos carneros y catorce corderos de un año, todos sin defecto.
Núm 29:30 Cada una de estas ofrendas de becerros, carneros y corderos deben ser acompañadas por su ofrenda obligatoria de grano y su ofrenda líquida.
Núm 29:31 También sacrifiquen un chivo como ofrenda por el pecado además de la ofrenda quemada habitual con su correspondiente ofrenda de grano y ofrenda líquida.
Núm 29:32 »El séptimo día del festival, sacrifiquen siete becerros, dos carneros y catorce corderos de un año, todos sin defecto.
Núm 29:33 Cada una de estas ofrendas de becerros, carneros y corderos deben ser acompañadas por su ofrenda obligatoria de grano y su ofrenda líquida.
Núm 29:34 También sacrifiquen un chivo como ofrenda por el pecado además de la ofrenda quemada habitual con su correspondiente ofrenda de grano y ofrenda líquida.
Núm 29:35 »El octavo día del festival, proclamen otro día santo. No hagan ningún trabajo habitual en ese día.
Núm 29:36 Presenten una ofrenda quemada como regalo especial, aroma agradable al SEÑOR, de un becerro, un carnero y siete corderos de un año, todos sin defecto.
Núm 29:37 Cada una de estas ofrendas deben ser acompañadas por su ofrenda obligatoria de grano y su ofrenda líquida.
Núm 29:38 También sacrifiquen un chivo como ofrenda por el pecado además de la ofrenda quemada habitual con su correspondiente ofrenda de grano y ofrenda líquida.
Núm 29:39 »Presenten estas ofrendas al SEÑOR durante sus festivales anuales. Estas ofrendas son además de los sacrificios y las ofrendas que presentan en relación con votos o como ofrendas voluntarias, ofrendas quemadas, ofrendas de grano, ofrendas líquidas u ofrendas de paz».
Núm 29:40 * Así que Moisés dio al pueblo de Israel todas estas instrucciones, tal como el SEÑOR le había ordenado.
Núm 30:1 * Moisés mandó llamar a los jefes de las tribus de Israel y les dijo: «Esto es lo que el SEÑOR ha ordenado:
Núm 30:2 un hombre que hace un voto al SEÑOR o una promesa bajo juramento, jamás deberá faltar a su palabra. Tiene que cumplir exactamente con lo que dijo que haría.
Núm 30:3 »Si una mujer joven hace un voto al SEÑOR o una promesa bajo juramento, mientras todavía vive en la casa de su padre,
Núm 30:4 y su padre se entera del voto o de la promesa y éste no se opone, entonces todos sus votos y todas sus promesas siguen en pie.
Núm 30:5 Sin embargo, si su padre, el día que se entera, se niega a darle permiso para que cumpla el voto o la promesa, quedarán anulados todos sus votos y todas sus promesas. El SEÑOR la perdonará porque su padre no le permitió cumplirlos.
Núm 30:6 »Ahora bien, supongamos que una joven hace un voto o se compromete a sí misma al hacer una promesa impulsiva y luego se casa.
Núm 30:7 Si su marido llega a saber de su voto o de su promesa y no se opone el día que se entera, sus votos y sus promesas siguen en pie.
Núm 30:8 Sin embargo, si su marido se niega a aceptar su voto o promesa impulsiva el día que se entera, sus compromisos quedarán anulados y el SEÑOR la perdonará.
Núm 30:9 Pero si se trata de una viuda o de una divorciada, esta persona deberá cumplir con todos sus votos y todas sus promesas.
Núm 30:10 »Ahora bien, supongamos que una mujer está casada y vive en casa de su esposo cuando ella hace un voto o se compromete a sí misma con una promesa.
Núm 30:11 Si su marido se entera y no se opone, entonces su voto o su promesa sigue en pie.
Núm 30:12 Pero si su marido se niega a aceptarlo el día que se entera, entonces su voto o su promesa quedará anulado y el SEÑOR la perdonará.
Núm 30:13 Su marido puede confirmar o anular todo voto o toda promesa que haya hecho para negarse a sí misma.
Núm 30:14 Pero si no se opone el día que se entera, esto significa que está de acuerdo con todos sus votos y todas sus promesas.
Núm 30:15 Si él espera más de un día y entonces intenta anular un voto o una promesa, él recibirá el castigo por la culpa de ella».
Núm 30:16 Estas son las ordenanzas que el SEÑOR le dio a Moisés acerca de las relaciones entre el hombre y su esposa y entre el padre y su hija joven que todavía vive en su casa.
Núm 28:2 «Da al pueblo de Israel estas instrucciones: las ofrendas especiales que ustedes presentan son un aroma agradable para mí; son mi pan. Asegúrense de que sean llevadas en el tiempo indicado y ofrecidas de acuerdo a mis instrucciones.
Núm 28:3 »Dile a los israelitas: esta es la ofrenda especial que deberán presentar al SEÑOR como ofrenda quemada diaria. Ofrezcan dos corderos de un año, que no tengan ningún defecto.
Núm 28:4 Sacrifiquen un cordero por la mañana y otro al atardecer.
Núm 28:5 Con cada cordero entreguen una ofrenda de grano de dos kilos* de harina selecta mezclada con un litro* de aceite puro de olivas prensadas.
Núm 28:6 Esta es la ofrenda quemada habitual, instituida en el monte Sinaí, como ofrenda especial, un aroma agradable al SEÑOR.
Núm 28:7 Junto con la ofrenda quemada presenten la ofrenda líquida apropiada de un litro de bebida fermentada por cada cordero y derrámenla en el Lugar Santo como ofrenda al SEÑOR.
Núm 28:8 Ofrezcan el segundo cordero al atardecer, con la misma ofrenda de grano y ofrenda líquida. También es una ofrenda especial, un aroma agradable al SEÑOR.
Núm 28:9 »En el día de descanso* sacrifiquen dos corderos de un año, sin defecto, junto con una ofrenda de grano de cuatro kilos* de harina selecta humedecida con aceite de oliva y una ofrenda líquida.
Núm 28:10 Esta es la ofrenda quemada que se presentará cada día de descanso, además de la ofrenda quemada habitual y su correspondiente ofrenda líquida.
Núm 28:11 »El primer día de cada mes presenten al SEÑOR una ofrenda quemada adicional de dos becerros, un carnero y siete corderos de un año, todos sin defecto.
Núm 28:12 Estas ofrendas deben ser acompañadas de ofrendas de grano de harina selecta humedecida con aceite de oliva, seis kilos* por cada becerro, cuatro kilos por cada carnero,
Núm 28:13 y dos kilos por cada cordero. Esta ofrenda quemada será especial, un aroma agradable al SEÑOR.
Núm 28:14 Ofrezcan también una ofrenda líquida con cada sacrificio: dos litros* de vino por cada becerro, un litro y medio* por cada carnero y un litro* por cada cordero. Presenten esta ofrenda quemada el primer día de cada mes, durante todo el año.
Núm 28:15 »El primer día de cada mes ofrezcan también al SEÑOR un chivo como sacrificio por el pecado además de la ofrenda quemada habitual y su correspondiente ofrenda líquida.
Núm 28:16 »Deben celebrar la Pascua del SEÑOR el día catorce del primer mes.*
Núm 28:17 El siguiente día —el día quince del mes— se iniciará un festival jubiloso de siete días, pero no comerán pan preparado con levadura.
Núm 28:18 El primer día del festival será un día oficial para celebrar una asamblea santa y no harán ningún trabajo habitual.
Núm 28:19 Como ofrenda especial presenten al SEÑOR una ofrenda quemada: dos becerros, un carnero y siete corderos de un año, todos sin defecto.
Núm 28:20 Estas serán acompañadas de las ofrendas de grano de harina selecta humedecidas con aceite de oliva: seis kilos con cada becerro, cuatro kilos con el carnero,
Núm 28:21 y dos kilos con cada uno de los siete corderos.
Núm 28:22 Ofrezcan también un chivo como ofrenda por el pecado, para purificarse y hacerse justos ante el SEÑOR.*
Núm 28:23 Estas ofrendas las presentarán además de la ofrenda quemada habitual de cada mañana.
Núm 28:24 Este es el procedimiento que deberán seguir —en cada uno de los siete días del festival— cuando preparen la comida que presenten como ofrenda especial, un aroma agradable al SEÑOR. Estas las ofrecerán además de las ofrendas quemadas habituales y de las ofrendas líquidas.
Núm 28:25 El séptimo día del festival será otro día especial para celebrar una asamblea santa, y ese día no harán ningún trabajo habitual.
Núm 28:26 »Durante el Festival de la Cosecha,* cuando presenten al SEÑOR lo primero de su nuevo grano, convoquen un día oficial para una asamblea santa y ese día no harán ningún trabajo habitual.
Núm 28:27 Ese día, presenten una ofrenda quemada especial como un aroma agradable al SEÑOR, compuesta de dos becerros, un carnero y siete corderos de un año.
Núm 28:28 Estas serán acompañadas de las ofrendas de grano de harina selecta humedecidas con aceite de oliva: seis kilos con cada becerro, cuatro kilos con el carnero
Núm 28:29 y dos kilos con cada uno de los siete corderos.
Núm 28:30 Ofrezcan también un chivo para purificarse y hacerse justos ante el SEÑOR.
Núm 28:31 Preparen estas ofrendas quemadas especiales, junto con sus ofrendas líquidas, además de la ofrenda quemada habitual y su correspondiente ofrenda de grano. Asegúrense de que los animales que sacrifiquen no tengan ningún defecto.
Núm 29:1 »Cada año, el primer día del mes señalado, al principio del otoño* , celebren el Festival de las Trompetas. Convoquen un día oficial para una asamblea santa y no hagan ningún trabajo habitual.
Núm 29:2 Ese día deben presentar una ofrenda quemada, como aroma agradable al SEÑOR: un becerro, un carnero y siete corderos de un año, todos sin defecto.
Núm 29:3 Estas deben ser acompañadas de las ofrendas de grano de harina selecta humedecidas con aceite de oliva: seis kilos* con el becerro, cuatro kilos* con el carnero
Núm 29:4 y dos kilos* con cada uno de los siete corderos.
Núm 29:5 Además sacrifiquen un chivo como ofrenda por el pecado, para purificarse y hacerse justos ante el SEÑOR.*
Núm 29:6 Estos sacrificios especiales, junto con sus ofrendas obligatorias de grano y las ofrendas líquidas, son además de las ofrendas quemadas habituales, mensuales y diarias. Se las presenta como ofrenda especial al SEÑOR, aroma agradable a él.
Núm 29:7 »Diez días después, el día diez del mismo mes,* convoquen otra asamblea santa. Ese día, el Día del Perdón, el pueblo no debe comer ni hacer ningún trabajo habitual.
Núm 29:8 Deberán presentar una ofrenda quemada como aroma agradable al SEÑOR: un becerro, un carnero y siete corderos de un año, todos sin defecto.
Núm 29:9 Estas ofrendas deben ser acompañadas por las ofrendas obligatorias de grano de harina selecta humedecidas con aceite de oliva: seis kilos de harina selecta con el becerro, cuatro kilos de harina selecta con el carnero
Núm 29:10 y dos kilos de harina selecta con cada uno de los siete corderos.
Núm 29:11 Sacrifiquen también un chivo como ofrenda por el pecado. Esta es además de la ofrenda por el pecado para el perdón y además de la ofrenda quemada diaria habitual, junto con su ofrenda de grano y sus correspondientes ofrendas líquidas.
Núm 29:12 »Cinco días después, el día quince del mismo mes,* convoquen otra asamblea santa de todo el pueblo y ese día no hagan ningún trabajo habitual. Ese día es el comienzo del Festival de las Enramadas,* un festival de siete días al SEÑOR.
Núm 29:13 El primer día del festival presenten, como ofrenda especial, una ofrenda quemada como aroma agradable al SEÑOR: trece becerros, dos carneros y catorce corderos de un año, todos sin defecto.
Núm 29:14 Cada una de estas ofrendas deben ser acompañadas por una ofrenda de grano de harina selecta humedecida con aceite de oliva: seis kilos para cada uno de los trece becerros, cuatro kilos para cada uno de los dos carneros
Núm 29:15 y dos kilos para cada uno de los catorce corderos.
Núm 29:16 También sacrifiquen un chivo como ofrenda por el pecado además de la ofrenda quemada habitual con su correspondiente ofrenda de grano y ofrenda líquida.
Núm 29:17 »El segundo día de este festival de siete días, sacrifiquen doce becerros, dos carneros y catorce corderos de un año, todos sin defecto.
Núm 29:18 Cada una de estas ofrendas de becerros, carneros y corderos deben ser acompañadas por su ofrenda obligatoria de grano y su ofrenda líquida.
Núm 29:19 También sacrifiquen un chivo como ofrenda por el pecado además de la ofrenda quemada habitual con su correspondiente ofrenda de grano y ofrenda líquida.
Núm 29:20 »El tercer día del festival, sacrifiquen once becerros, dos carneros y catorce corderos de un año, todos sin defecto.
Núm 29:21 Cada una de estas ofrendas de becerros, carneros y corderos deben ser acompañadas por su ofrenda obligatoria de grano y su ofrenda líquida.
Núm 29:22 También sacrifiquen un chivo como ofrenda por el pecado además de la ofrenda quemada habitual con su correspondiente ofrenda de grano y ofrenda líquida.
Núm 29:23 »El cuarto día del festival, sacrifiquen diez becerros, dos carneros y catorce corderos de un año, todos sin defecto.
Núm 29:24 Cada una de estas ofrendas de becerros, carneros y corderos deben ser acompañadas por su ofrenda obligatoria de grano y su ofrenda líquida.
Núm 29:25 También sacrifiquen un chivo como ofrenda por el pecado además de la ofrenda quemada habitual con su correspondiente ofrenda de grano y ofrenda líquida.
Núm 29:26 »El día quinto del festival, sacrifiquen nueve becerros, dos carneros y catorce corderos de un año, todos sin defecto.
Núm 29:27 Cada una de estas ofrendas de becerros, carneros y corderos deben ser acompañadas por su ofrenda obligatoria de grano y su ofrenda líquida.
Núm 29:28 También sacrifiquen un chivo como ofrenda por el pecado además de la ofrenda quemada habitual con su correspondiente ofrenda de grano y ofrenda líquida.
Núm 29:29 »El sexto día del festival, sacrifiquen ocho becerros, dos carneros y catorce corderos de un año, todos sin defecto.
Núm 29:30 Cada una de estas ofrendas de becerros, carneros y corderos deben ser acompañadas por su ofrenda obligatoria de grano y su ofrenda líquida.
Núm 29:31 También sacrifiquen un chivo como ofrenda por el pecado además de la ofrenda quemada habitual con su correspondiente ofrenda de grano y ofrenda líquida.
Núm 29:32 »El séptimo día del festival, sacrifiquen siete becerros, dos carneros y catorce corderos de un año, todos sin defecto.
Núm 29:33 Cada una de estas ofrendas de becerros, carneros y corderos deben ser acompañadas por su ofrenda obligatoria de grano y su ofrenda líquida.
Núm 29:34 También sacrifiquen un chivo como ofrenda por el pecado además de la ofrenda quemada habitual con su correspondiente ofrenda de grano y ofrenda líquida.
Núm 29:35 »El octavo día del festival, proclamen otro día santo. No hagan ningún trabajo habitual en ese día.
Núm 29:36 Presenten una ofrenda quemada como regalo especial, aroma agradable al SEÑOR, de un becerro, un carnero y siete corderos de un año, todos sin defecto.
Núm 29:37 Cada una de estas ofrendas deben ser acompañadas por su ofrenda obligatoria de grano y su ofrenda líquida.
Núm 29:38 También sacrifiquen un chivo como ofrenda por el pecado además de la ofrenda quemada habitual con su correspondiente ofrenda de grano y ofrenda líquida.
Núm 29:39 »Presenten estas ofrendas al SEÑOR durante sus festivales anuales. Estas ofrendas son además de los sacrificios y las ofrendas que presentan en relación con votos o como ofrendas voluntarias, ofrendas quemadas, ofrendas de grano, ofrendas líquidas u ofrendas de paz».
Núm 29:40 * Así que Moisés dio al pueblo de Israel todas estas instrucciones, tal como el SEÑOR le había ordenado.
Núm 30:1 * Moisés mandó llamar a los jefes de las tribus de Israel y les dijo: «Esto es lo que el SEÑOR ha ordenado:
Núm 30:2 un hombre que hace un voto al SEÑOR o una promesa bajo juramento, jamás deberá faltar a su palabra. Tiene que cumplir exactamente con lo que dijo que haría.
Núm 30:3 »Si una mujer joven hace un voto al SEÑOR o una promesa bajo juramento, mientras todavía vive en la casa de su padre,
Núm 30:4 y su padre se entera del voto o de la promesa y éste no se opone, entonces todos sus votos y todas sus promesas siguen en pie.
Núm 30:5 Sin embargo, si su padre, el día que se entera, se niega a darle permiso para que cumpla el voto o la promesa, quedarán anulados todos sus votos y todas sus promesas. El SEÑOR la perdonará porque su padre no le permitió cumplirlos.
Núm 30:6 »Ahora bien, supongamos que una joven hace un voto o se compromete a sí misma al hacer una promesa impulsiva y luego se casa.
Núm 30:7 Si su marido llega a saber de su voto o de su promesa y no se opone el día que se entera, sus votos y sus promesas siguen en pie.
Núm 30:8 Sin embargo, si su marido se niega a aceptar su voto o promesa impulsiva el día que se entera, sus compromisos quedarán anulados y el SEÑOR la perdonará.
Núm 30:9 Pero si se trata de una viuda o de una divorciada, esta persona deberá cumplir con todos sus votos y todas sus promesas.
Núm 30:10 »Ahora bien, supongamos que una mujer está casada y vive en casa de su esposo cuando ella hace un voto o se compromete a sí misma con una promesa.
Núm 30:11 Si su marido se entera y no se opone, entonces su voto o su promesa sigue en pie.
Núm 30:12 Pero si su marido se niega a aceptarlo el día que se entera, entonces su voto o su promesa quedará anulado y el SEÑOR la perdonará.
Núm 30:13 Su marido puede confirmar o anular todo voto o toda promesa que haya hecho para negarse a sí misma.
Núm 30:14 Pero si no se opone el día que se entera, esto significa que está de acuerdo con todos sus votos y todas sus promesas.
Núm 30:15 Si él espera más de un día y entonces intenta anular un voto o una promesa, él recibirá el castigo por la culpa de ella».
Núm 30:16 Estas son las ordenanzas que el SEÑOR le dio a Moisés acerca de las relaciones entre el hombre y su esposa y entre el padre y su hija joven que todavía vive en su casa.
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