LECTURA PARA LA MAÑANA
JUAN 20:1-9
Jua 20:1 El domingo por la mañana temprano,* mientras aún estaba oscuro, María Magdalena llegó a la tumba y vio que habían rodado la piedra de la entrada.
Jua 20:2 Corrió y se encontró con Simón Pedro y con el otro discípulo, a quien Jesús amaba. Les dijo: «¡Sacaron de la tumba el cuerpo del Señor, y no sabemos dónde lo pusieron!».
Jua 20:3 Pedro y el otro discípulo se dirigieron a la tumba.
Jua 20:4 Ambos iban corriendo, pero el otro discípulo corrió más aprisa que Pedro y llegó primero a la tumba.
Jua 20:5 Se agachó a mirar adentro y vio los lienzos de lino apoyados ahí, pero no entró.
Jua 20:6 Luego llegó Simón Pedro y entró en la tumba. Él también notó los lienzos de lino allí,
Jua 20:7 pero el lienzo que había cubierto la cabeza de Jesús estaba doblado y colocado aparte de las otras tiras.
Jua 20:8 Entonces el discípulo que había llegado primero a la tumba también entró y vio y creyó,
Jua 20:9 porque hasta ese momento aún no habían entendido las Escrituras que decían que Jesús tenía que resucitar de los muertos.
Jua 20:2 Corrió y se encontró con Simón Pedro y con el otro discípulo, a quien Jesús amaba. Les dijo: «¡Sacaron de la tumba el cuerpo del Señor, y no sabemos dónde lo pusieron!».
Jua 20:3 Pedro y el otro discípulo se dirigieron a la tumba.
Jua 20:4 Ambos iban corriendo, pero el otro discípulo corrió más aprisa que Pedro y llegó primero a la tumba.
Jua 20:5 Se agachó a mirar adentro y vio los lienzos de lino apoyados ahí, pero no entró.
Jua 20:6 Luego llegó Simón Pedro y entró en la tumba. Él también notó los lienzos de lino allí,
Jua 20:7 pero el lienzo que había cubierto la cabeza de Jesús estaba doblado y colocado aparte de las otras tiras.
Jua 20:8 Entonces el discípulo que había llegado primero a la tumba también entró y vio y creyó,
Jua 20:9 porque hasta ese momento aún no habían entendido las Escrituras que decían que Jesús tenía que resucitar de los muertos.
APOCALIPSIS 17
Apo 17:1 Uno de los siete ángeles que derramaron las siete copas se acercó y me dijo: «Ven conmigo, y te mostraré la sentencia que recibirá la gran prostituta, que gobierna* sobre muchas aguas.
Apo 17:2 Los reyes del mundo cometieron adulterio con ella, y los que pertenecen a este mundo se emborracharon con el vino de su inmoralidad».
Apo 17:3 Entonces el ángel me llevó en el Espíritu* al desierto. Allí vi a una mujer sentada sobre una bestia de color escarlata que tenía siete cabezas y diez cuernos, y estaba llena de blasfemias escritas contra Dios.
Apo 17:4 La mujer estaba vestida de púrpura y escarlata y llevaba puestas hermosas joyas de oro, piedras preciosas y perlas. En la mano tenía una copa de oro llena de obscenidades y de las inmundicias de su inmoralidad.
Apo 17:5 Tenía escrito en la frente un nombre misterioso: Babilonia la grande, madre de todas las prostitutas y obscenidades del mundo.
Apo 17:6 Pude ver que ella estaba borracha, borracha de la sangre del pueblo santo de Dios, es decir los que testificaron de Jesús. Me quedé mirándola totalmente asombrado.
Apo 17:7 «¿Por qué te asombras tanto? —preguntó el ángel —. Te explicaré el misterio de esta mujer y de la bestia con siete cabezas y diez cuernos sobre la que ella está sentada.
Apo 17:8 La bestia que viste, antes vivía pero ya no. Sin embargo, pronto subirá del abismo sin fondo* e irá a la destrucción eterna. Los que pertenecen a este mundo cuyos nombres no fueron escritos en el Libro de la Vida antes de la creación del mundo, se asombrarán al ver la reaparición de esta bestia, que había muerto.
Apo 17:9 »Aquí se requiere una mente con entendimiento: Las siete cabezas de la bestia representan las siete colinas donde la mujer gobierna. También representan siete reyes:
Apo 17:10 Cinco reyes ya han caído, el sexto reina actualmente, y el séptimo todavía no ha llegado pero su reino será breve.
Apo 17:11 »La bestia escarlata que existía pero que ya no existe es el octavo rey. Este rey es como los otros siete, y él también va rumbo a la destrucción.
Apo 17:12 Los diez cuernos de la bestia son diez reyes que todavía no han subido al poder; pero éstos serán designados como reyes por un breve momento para reinar junto con la bestia.
Apo 17:13 Los diez estarán de acuerdo en entregarle a la bestia el poder y la autoridad que tienen.
Apo 17:14 Irán juntos a la guerra contra el Cordero, pero el Cordero los derrotará porque él es el Señor de todos los señores y el Rey de todos los reyes. Y los que él ha llamado y elegido y le son fieles, estarán con él».
Apo 17:15 Luego el ángel me dijo: «Las aguas donde la prostituta gobierna representan grandes multitudes de cada nación y lengua.
Apo 17:16 Tanto la bestia escarlata como sus diez cuernos odian a la prostituta. La desnudarán, comerán su carne y quemarán con fuego lo que quede de ella.
Apo 17:17 Pues Dios les ha puesto un plan en la mente, un plan que llevará a cabo los propósitos de Dios. Ellos estarán de acuerdo en entregarle a la bestia escarlata la autoridad que tienen, y así se cumplirán las palabras de Dios.
Apo 17:18 La mujer que viste en la visión representa la gran ciudad que reina sobre los reyes del mundo».
Apo 17:2 Los reyes del mundo cometieron adulterio con ella, y los que pertenecen a este mundo se emborracharon con el vino de su inmoralidad».
Apo 17:3 Entonces el ángel me llevó en el Espíritu* al desierto. Allí vi a una mujer sentada sobre una bestia de color escarlata que tenía siete cabezas y diez cuernos, y estaba llena de blasfemias escritas contra Dios.
Apo 17:4 La mujer estaba vestida de púrpura y escarlata y llevaba puestas hermosas joyas de oro, piedras preciosas y perlas. En la mano tenía una copa de oro llena de obscenidades y de las inmundicias de su inmoralidad.
Apo 17:5 Tenía escrito en la frente un nombre misterioso: Babilonia la grande, madre de todas las prostitutas y obscenidades del mundo.
Apo 17:6 Pude ver que ella estaba borracha, borracha de la sangre del pueblo santo de Dios, es decir los que testificaron de Jesús. Me quedé mirándola totalmente asombrado.
Apo 17:7 «¿Por qué te asombras tanto? —preguntó el ángel —. Te explicaré el misterio de esta mujer y de la bestia con siete cabezas y diez cuernos sobre la que ella está sentada.
Apo 17:8 La bestia que viste, antes vivía pero ya no. Sin embargo, pronto subirá del abismo sin fondo* e irá a la destrucción eterna. Los que pertenecen a este mundo cuyos nombres no fueron escritos en el Libro de la Vida antes de la creación del mundo, se asombrarán al ver la reaparición de esta bestia, que había muerto.
Apo 17:9 »Aquí se requiere una mente con entendimiento: Las siete cabezas de la bestia representan las siete colinas donde la mujer gobierna. También representan siete reyes:
Apo 17:10 Cinco reyes ya han caído, el sexto reina actualmente, y el séptimo todavía no ha llegado pero su reino será breve.
Apo 17:11 »La bestia escarlata que existía pero que ya no existe es el octavo rey. Este rey es como los otros siete, y él también va rumbo a la destrucción.
Apo 17:12 Los diez cuernos de la bestia son diez reyes que todavía no han subido al poder; pero éstos serán designados como reyes por un breve momento para reinar junto con la bestia.
Apo 17:13 Los diez estarán de acuerdo en entregarle a la bestia el poder y la autoridad que tienen.
Apo 17:14 Irán juntos a la guerra contra el Cordero, pero el Cordero los derrotará porque él es el Señor de todos los señores y el Rey de todos los reyes. Y los que él ha llamado y elegido y le son fieles, estarán con él».
Apo 17:15 Luego el ángel me dijo: «Las aguas donde la prostituta gobierna representan grandes multitudes de cada nación y lengua.
Apo 17:16 Tanto la bestia escarlata como sus diez cuernos odian a la prostituta. La desnudarán, comerán su carne y quemarán con fuego lo que quede de ella.
Apo 17:17 Pues Dios les ha puesto un plan en la mente, un plan que llevará a cabo los propósitos de Dios. Ellos estarán de acuerdo en entregarle a la bestia escarlata la autoridad que tienen, y así se cumplirán las palabras de Dios.
Apo 17:18 La mujer que viste en la visión representa la gran ciudad que reina sobre los reyes del mundo».
JOB 38:22-41
Job 38:22 »¿Has visitado los depósitos de la nieve o has visto donde se guarda el granizo?
Job 38:23 (Los he reservado como armas para el tiempo de angustia, para el día de la batalla y de la guerra).
Job 38:24 ¿Dónde está el camino hacia la fuente de luz? ¿Dónde está el hogar del viento del oriente?
Job 38:25 »¿Quién creó un canal para los torrentes de lluvia? ¿Quién trazó el sendero del relámpago?
Job 38:26 ¿Quién hace caer la lluvia en tierra árida, en el desierto donde nadie vive?
Job 38:27 ¿Quién envía la lluvia para saciar la tierra seca y hace que brote la hierba tierna?
Job 38:28 »¿Tiene padre la lluvia? ¿Quién da a luz el rocío?
Job 38:29 ¿Quién es la madre del hielo? ¿Quién da a luz la escarcha que viene del cielo?
Job 38:30 Pues el agua se convierte en hielo, duro como la roca, y la superficie del agua se congela.
Job 38:31 »¿Puedes tú guiar el movimiento de las estrellas y atar el grupo de las Pléyades o aflojar las cuerdas de Orión?
Job 38:32 ¿Puedes ordenar la secuencia de las estaciones o guiar a la Osa con sus cachorros a través del cielo?
Job 38:33 ¿Conoces las leyes del universo? ¿Puedes usarlas para regular la tierra?
Job 38:34 »¿Puedes gritar a las nubes y hacer que llueva?
Job 38:35 ¿Puedes hacer que aparezca el relámpago y que caiga hacia donde lo dirijas?
Job 38:36 ¿Quién da la intuición al corazón y el instinto a la mente?
Job 38:37 ¿Quién es lo suficientemente sabio para contar las nubes? ¿Quién puede inclinar los cántaros de los cielos
Job 38:38 cuando la tierra reseca está árida y el suelo, convertido en terrones?
Job 38:39 »¿Puedes acechar la presa para la leona y saciar el hambre de los cachorros
Job 38:40 cuando están tendidos en sus guaridas o se agazapan en los matorrales?
Job 38:41 ¿Quién da comida a los cuervos cuando sus crías claman a Dios y andan errantes con hambre?
Job 38:22 »¿Has visitado los depósitos de la nieve o has visto donde se guarda el granizo?
Job 38:23 (Los he reservado como armas para el tiempo de angustia, para el día de la batalla y de la guerra).
Job 38:24 ¿Dónde está el camino hacia la fuente de luz? ¿Dónde está el hogar del viento del oriente?
Job 38:25 »¿Quién creó un canal para los torrentes de lluvia? ¿Quién trazó el sendero del relámpago?
Job 38:26 ¿Quién hace caer la lluvia en tierra árida, en el desierto donde nadie vive?
Job 38:27 ¿Quién envía la lluvia para saciar la tierra seca y hace que brote la hierba tierna?
Job 38:28 »¿Tiene padre la lluvia? ¿Quién da a luz el rocío?
Job 38:29 ¿Quién es la madre del hielo? ¿Quién da a luz la escarcha que viene del cielo?
Job 38:30 Pues el agua se convierte en hielo, duro como la roca, y la superficie del agua se congela.
Job 38:31 »¿Puedes tú guiar el movimiento de las estrellas y atar el grupo de las Pléyades o aflojar las cuerdas de Orión?
Job 38:32 ¿Puedes ordenar la secuencia de las estaciones o guiar a la Osa con sus cachorros a través del cielo?
Job 38:33 ¿Conoces las leyes del universo? ¿Puedes usarlas para regular la tierra?
Job 38:34 »¿Puedes gritar a las nubes y hacer que llueva?
Job 38:35 ¿Puedes hacer que aparezca el relámpago y que caiga hacia donde lo dirijas?
Job 38:36 ¿Quién da la intuición al corazón y el instinto a la mente?
Job 38:37 ¿Quién es lo suficientemente sabio para contar las nubes? ¿Quién puede inclinar los cántaros de los cielos
Job 38:38 cuando la tierra reseca está árida y el suelo, convertido en terrones?
Job 38:39 »¿Puedes acechar la presa para la leona y saciar el hambre de los cachorros
Job 38:40 cuando están tendidos en sus guaridas o se agazapan en los matorrales?
Job 38:41 ¿Quién da comida a los cuervos cuando sus crías claman a Dios y andan errantes con hambre?
Job 38:23 (Los he reservado como armas para el tiempo de angustia, para el día de la batalla y de la guerra).
Job 38:24 ¿Dónde está el camino hacia la fuente de luz? ¿Dónde está el hogar del viento del oriente?
Job 38:25 »¿Quién creó un canal para los torrentes de lluvia? ¿Quién trazó el sendero del relámpago?
Job 38:26 ¿Quién hace caer la lluvia en tierra árida, en el desierto donde nadie vive?
Job 38:27 ¿Quién envía la lluvia para saciar la tierra seca y hace que brote la hierba tierna?
Job 38:28 »¿Tiene padre la lluvia? ¿Quién da a luz el rocío?
Job 38:29 ¿Quién es la madre del hielo? ¿Quién da a luz la escarcha que viene del cielo?
Job 38:30 Pues el agua se convierte en hielo, duro como la roca, y la superficie del agua se congela.
Job 38:31 »¿Puedes tú guiar el movimiento de las estrellas y atar el grupo de las Pléyades o aflojar las cuerdas de Orión?
Job 38:32 ¿Puedes ordenar la secuencia de las estaciones o guiar a la Osa con sus cachorros a través del cielo?
Job 38:33 ¿Conoces las leyes del universo? ¿Puedes usarlas para regular la tierra?
Job 38:34 »¿Puedes gritar a las nubes y hacer que llueva?
Job 38:35 ¿Puedes hacer que aparezca el relámpago y que caiga hacia donde lo dirijas?
Job 38:36 ¿Quién da la intuición al corazón y el instinto a la mente?
Job 38:37 ¿Quién es lo suficientemente sabio para contar las nubes? ¿Quién puede inclinar los cántaros de los cielos
Job 38:38 cuando la tierra reseca está árida y el suelo, convertido en terrones?
Job 38:39 »¿Puedes acechar la presa para la leona y saciar el hambre de los cachorros
Job 38:40 cuando están tendidos en sus guaridas o se agazapan en los matorrales?
Job 38:41 ¿Quién da comida a los cuervos cuando sus crías claman a Dios y andan errantes con hambre?
LECTURA PARA LA NOCHE
SOFONÍAS 3
Sof 3:1 ¡Qué aflicción le espera a la rebelde y contaminada Jerusalén, la ciudad de violencia y crimen!
Sof 3:2 Nadie puede decirle nada; rechaza toda corrección. No confía en el SEÑOR ni se acerca a su Dios.
Sof 3:3 Sus líderes son como leones rugientes en cacería de sus víctimas. Sus jueces son como lobos voraces al anochecer, que no dejan rastro de sus presas al amanecer.
Sof 3:4 Sus profetas son mentirosos y arrogantes, en busca de su propia ganancia. Sus sacerdotes profanan el templo al desobedecer las instrucciones de Dios.
Sof 3:5 Pero el SEÑOR todavía está en la ciudad, y él no hace nada malo. Día tras día emite justicia, él nunca falla. Pero los perversos no conocen la vergüenza.
Sof 3:6 «Yo he aniquilado a muchas naciones y he devastado las murallas y torres de sus fortalezas. Las calles ahora están desiertas; sus ciudades quedan en ruinas silenciosas. No quedó nadie con vida, ni siquiera uno.
Sof 3:7 Yo pensé: “¡Seguramente ahora me temerán! Sin duda, escucharán mis advertencias. Entonces no necesitaré intervenir otra vez y destruir sus casas”. ¡Pero no es así! Se levantan temprano para continuar con sus malas acciones.
Sof 3:8 Por lo tanto tengan paciencia —dice el SEÑOR—. Pronto me levantaré y acusaré a esas naciones malvadas. Pues he decidido reunir a los reinos de la tierra y descargar mi más feroz ira y furia sobre ellos. Toda la tierra será consumida por el fuego de mi celo.
Sof 3:9 »Entonces purificaré el lenguaje de todos los pueblos, para que todos juntos puedan adorar al SEÑOR.
Sof 3:10 Mi pueblo disperso, que vive más allá de los ríos de Etiopía* vendrá a presentar sus ofrendas.
Sof 3:11 En ese día ya no hará falta que sean avergonzados, porque dejarán de rebelarse contra mí. Quitaré al orgulloso y al arrogante de entre ustedes; no habrá más altivez en mi monte santo.
Sof 3:12 Quedarán sólo los sencillos y los humildes porque son ellos quienes confían en el nombre del SEÑOR.
Sof 3:13 Los del remanente de Israel no harán nada malo; nunca mentirán ni se engañarán unos a otros. Comerán y dormirán seguros, sin que nadie los atemorice».
Sof 3:14 ¡Canta, oh hija de Sión; grita fuerte, oh Israel! ¡Alégrate y gózate con todo tu corazón, oh hija de Jerusalén!
Sof 3:15 Pues el SEÑOR quitará su mano de juicio y dispersará a los ejércitos de tus enemigos. ¡El SEÑOR mismo, el Rey de Israel, vivirá en medio de ti! Por fin, se habrán terminado tus aflicciones y nunca jamás temerás el desastre.
Sof 3:16 En ese día, la proclama en Jerusalén será: «¡Ánimo Sión! ¡No temas!
Sof 3:17 Pues el SEÑOR tu Dios vive en medio de ti. Él es un poderoso salvador. Se deleitará en ti con alegría. Con su amor calmará todos tus temores.* Se gozará por ti con cantos de alegría».
Sof 3:18 «Reuniré a los que añoran los festivales establecidos; nunca más serán avergonzados.*
Sof 3:19 Sin embargo, trataré con severidad a quienes te oprimieron. Salvaré al débil y al indefenso; reuniré a los que fueron expulsados. Daré gloria y renombre a los que fueron desterrados dondequiera que hayan sido ridiculizados y avergonzados.
Sof 3:20 En ese día los reuniré y los traeré de regreso a casa. Les daré un buen nombre, un nombre distinguido entre todas las naciones de la tierra, cuando, ante sus propios ojos, restauraré tu bienestar. ¡Yo, el SEÑOR, he hablado!».
Sof 3:2 Nadie puede decirle nada; rechaza toda corrección. No confía en el SEÑOR ni se acerca a su Dios.
Sof 3:3 Sus líderes son como leones rugientes en cacería de sus víctimas. Sus jueces son como lobos voraces al anochecer, que no dejan rastro de sus presas al amanecer.
Sof 3:4 Sus profetas son mentirosos y arrogantes, en busca de su propia ganancia. Sus sacerdotes profanan el templo al desobedecer las instrucciones de Dios.
Sof 3:5 Pero el SEÑOR todavía está en la ciudad, y él no hace nada malo. Día tras día emite justicia, él nunca falla. Pero los perversos no conocen la vergüenza.
Sof 3:6 «Yo he aniquilado a muchas naciones y he devastado las murallas y torres de sus fortalezas. Las calles ahora están desiertas; sus ciudades quedan en ruinas silenciosas. No quedó nadie con vida, ni siquiera uno.
Sof 3:7 Yo pensé: “¡Seguramente ahora me temerán! Sin duda, escucharán mis advertencias. Entonces no necesitaré intervenir otra vez y destruir sus casas”. ¡Pero no es así! Se levantan temprano para continuar con sus malas acciones.
Sof 3:8 Por lo tanto tengan paciencia —dice el SEÑOR—. Pronto me levantaré y acusaré a esas naciones malvadas. Pues he decidido reunir a los reinos de la tierra y descargar mi más feroz ira y furia sobre ellos. Toda la tierra será consumida por el fuego de mi celo.
Sof 3:9 »Entonces purificaré el lenguaje de todos los pueblos, para que todos juntos puedan adorar al SEÑOR.
Sof 3:10 Mi pueblo disperso, que vive más allá de los ríos de Etiopía* vendrá a presentar sus ofrendas.
Sof 3:11 En ese día ya no hará falta que sean avergonzados, porque dejarán de rebelarse contra mí. Quitaré al orgulloso y al arrogante de entre ustedes; no habrá más altivez en mi monte santo.
Sof 3:12 Quedarán sólo los sencillos y los humildes porque son ellos quienes confían en el nombre del SEÑOR.
Sof 3:13 Los del remanente de Israel no harán nada malo; nunca mentirán ni se engañarán unos a otros. Comerán y dormirán seguros, sin que nadie los atemorice».
Sof 3:14 ¡Canta, oh hija de Sión; grita fuerte, oh Israel! ¡Alégrate y gózate con todo tu corazón, oh hija de Jerusalén!
Sof 3:15 Pues el SEÑOR quitará su mano de juicio y dispersará a los ejércitos de tus enemigos. ¡El SEÑOR mismo, el Rey de Israel, vivirá en medio de ti! Por fin, se habrán terminado tus aflicciones y nunca jamás temerás el desastre.
Sof 3:16 En ese día, la proclama en Jerusalén será: «¡Ánimo Sión! ¡No temas!
Sof 3:17 Pues el SEÑOR tu Dios vive en medio de ti. Él es un poderoso salvador. Se deleitará en ti con alegría. Con su amor calmará todos tus temores.* Se gozará por ti con cantos de alegría».
Sof 3:18 «Reuniré a los que añoran los festivales establecidos; nunca más serán avergonzados.*
Sof 3:19 Sin embargo, trataré con severidad a quienes te oprimieron. Salvaré al débil y al indefenso; reuniré a los que fueron expulsados. Daré gloria y renombre a los que fueron desterrados dondequiera que hayan sido ridiculizados y avergonzados.
Sof 3:20 En ese día los reuniré y los traeré de regreso a casa. Les daré un buen nombre, un nombre distinguido entre todas las naciones de la tierra, cuando, ante sus propios ojos, restauraré tu bienestar. ¡Yo, el SEÑOR, he hablado!».
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