APOSENTO ALTO

domingo, 17 de diciembre de 2017

LECTURA BÍBLICA 17 DE DICIEMBRE

LECTURA PARA LA MAÑANA

JUAN     19:17-27

Mat 19:17 —¿Por qué me preguntas a mí sobre lo que es bueno? —respondió Jesús —. Sólo hay Uno que es bueno. Pero, para contestar a tu pregunta, si deseas recibir la vida eterna, cumple* los mandamientos.
Mat 19:18 —¿Cuáles? —preguntó el hombre. Y Jesús le contestó: —“No cometas asesinato; no cometas adulterio; no robes; no des falso testimonio;
Mat 19:19 honra a tu padre y a tu madre; ama a tu prójimo como a ti mismo”*.
Mat 19:20 —He obedecido todos esos mandamientos —respondió el joven —. ¿Qué más debo hacer?
Mat 19:21 Jesús le dijo: —Si deseas ser perfecto, anda, vende todas tus posesiones y entrega el dinero a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo. Después ven y sígueme.
Mat 19:22 Pero, cuando el joven escuchó lo que Jesús le dijo, se fue triste porque tenía muchas posesiones.
Mat 19:23 Entonces Jesús dijo a sus discípulos: «Les digo la verdad, es muy difícil que una persona rica entre en el reino del cielo.
Mat 19:24 Lo repito: es más fácil que un camello pase por el ojo de una aguja que un rico entre en el reino de Dios».
Mat 19:25 Los discípulos quedaron atónitos. —Entonces, ¿quién podrá ser salvo? —preguntaron.
Mat 19:26 Jesús los miró fijamente y dijo: —Humanamente hablando es imposible, pero para Dios todo es posible.
Mat 19:27 Entonces Pedro le dijo: —Nosotros hemos dejado todo para seguirte. ¿Qué recibiremos a cambio?


 APOCALIPSIS  14

Apo 14:1 Luego vi al Cordero de pie sobre el monte Sión, y con él había 144.000 que tenían el nombre del Cordero y el de su Padre escrito en la frente.
Apo 14:2 Y oí un sonido que venía del cielo, era como el rugido de grandes olas del mar o el retumbar de fuertes truenos. Parecía el sonido de muchos arpistas tocando juntos.
Apo 14:3 Ese gran coro entonaba un nuevo canto maravilloso delante del trono de Dios y delante de los cuatro seres vivientes y los veinticuatro ancianos. Nadie podía aprender ese canto aparte de los 144.000 que habían sido rescatados de la tierra.
Apo 14:4 Ellos se han mantenido tan puros como vírgenes,* y son los que siguen al Cordero dondequiera que va. Han sido comprados de entre los pueblos de la tierra como ofrenda especial* para Dios y para el Cordero.
Apo 14:5 Ellos no han dicho mentiras y son intachables.
Apo 14:6 Y vi a otro ángel, que volaba por el cielo y llevaba la eterna Buena Noticia para proclamarla a los que pertenecen a este mundo: a todo pueblo y toda nación, tribu y lengua.
Apo 14:7 «Teman a Dios —gritaba —. Denle gloria a él, porque ha llegado el tiempo en que ocupe su lugar como juez. Adoren al que hizo los cielos, la tierra, el mar y todos los manantiales de agua».
Apo 14:8 Luego otro ángel lo siguió por el cielo mientras gritaba: «Babilonia ha caído —cayó esa gran ciudad —porque hizo que todas las naciones del mundo bebieran el vino de su apasionada inmoralidad».
Apo 14:9 Después un tercer ángel los siguió mientras gritaba: «Todo el que adore a la bestia y a su estatua o acepte su marca en la frente o en la mano
Apo 14:10 tendrá que beber el vino de la ira de Dios, que se ha servido sin diluir en la copa del furor de Dios. Ellos serán atormentados con fuego y azufre ardiente en presencia de los ángeles santos y del Cordero.
Apo 14:11 El humo de su tormento subirá por siempre jamás, y no tendrán alivio ni de día ni de noche, porque adoraron a la bestia y a su estatua y aceptaron la marca de su nombre».
Apo 14:12 Esto significa que el pueblo de Dios tiene que soportar la persecución con paciencia, obedeciendo sus mandamientos y manteniendo la fe en Jesús.
Apo 14:13 Y oí una voz del cielo que decía: «Escribe lo siguiente: benditos son los que de ahora en adelante mueran en el Señor. El Espíritu dice: “Sí, ellos son en verdad benditos, porque descansarán de su arduo trabajo, ¡pues sus buenas acciones los siguen!”».
Apo 14:14 Entonces vi una nube blanca y sentado en la nube estaba alguien parecido al Hijo del Hombre.* Tenía una corona de oro en la cabeza y en la mano una hoz afilada.
Apo 14:15 Entonces vino otro ángel desde el templo y le gritó al que estaba sentado en la nube: «Da rienda suelta a la hoz, porque ha llegado el tiempo para cosechar; ya está madura la cosecha en la tierra».
Apo 14:16 Y el que estaba sentado en la nube pasó la hoz sobre la tierra, y toda la tierra fue cosechada.
Apo 14:17 Después vino otro ángel desde el templo que está en el cielo, y él también tenía una hoz afilada.
Apo 14:18 Luego otro ángel, que tenía poder para destruir con fuego, vino desde el altar y le gritó al ángel que tenía la hoz afilada: «Pasa ahora tu hoz y junta los racimos de los viñedos de la tierra, porque las uvas ya están maduras para el juicio».
Apo 14:19 Así que el ángel pasó su hoz sobre la tierra y echó las uvas en el gran lagar de la ira de Dios.
Apo 14:20 Las uvas fueron pisadas en el lagar fuera de la ciudad, y del lagar brotó un río de sangre de unos trescientos kilómetros* de largo y de una altura que llegaba a los frenos de un caballo.

JOB  36:16-33

Job 36:16 »Job, Dios está alejándote del peligro, y te lleva a un lugar libre de angustia. Está poniendo en tu mesa la mejor comida,
Job 36:17 pero te obsesiona saber si los incrédulos serán juzgados. No te preocupes, el juicio y la justicia prevalecerán.
Job 36:18 Ten cuidado, o la riqueza podrá seducirte;* No dejes que el soborno te haga pecar.
Job 36:19 ¿Podrá toda tu riqueza* o podrán todos tus grandes esfuerzos protegerte de la angustia?
Job 36:20 No desees el amparo de la noche porque allí es cuando la gente será destruida.*
Job 36:21 ¡Mantente en guardia! Apártate de lo malo, porque Dios envió este sufrimiento para protegerte de una vida de maldad.
Job 36:22 »Mira, Dios es todopoderoso. ¿Quién es un maestro como él?
Job 36:23 Nadie puede indicarle lo que tiene que hacer, ni decirle: “Has hecho mal”.
Job 36:24 En cambio, glorifica tú sus obras poderosas, entonando canciones de alabanza.
Job 36:25 Todo el mundo ha visto estas cosas, aunque sólo desde lejos.
Job 36:26 »Mira, Dios es más grande de lo que podemos comprender; sus años no se pueden contar.
Job 36:27 Él hace subir el vapor de agua y luego lo destila en lluvia.
Job 36:28 La lluvia se derrama desde las nubes, y todos se benefician.
Job 36:29 ¿Quién puede comprender el despliegue de las nubes y el trueno que retumba desde los cielos?
Job 36:30 Mira cómo Dios extiende el relámpago a su alrededor e ilumina las profundidades del mar.
Job 36:31 Por medio de esos actos poderosos él nutre* a la gente, dándole comida en abundancia.
Job 36:32 Él llena sus manos de rayos y lanza cada uno a su objetivo.
Job 36:33 El trueno declara su presencia; la tormenta anuncia su enojo indignado.*


LECTURA PARA LA NOCHE

NAHUM  1-3

Nah 1:1 Este mensaje sobre Nínive vino como una visión a Nahúm, que vivía en Elcos.
Nah 1:2 El SEÑOR es Dios celoso, lleno de ira y venganza. ¡Él toma venganza de todos los que se le oponen y persiste en su furia contra sus enemigos!
Nah 1:3 El SEÑOR es lento para enojarse, pero su poder es grande y nunca deja sin castigo al culpable. Da muestras de su poder en el torbellino y la tormenta; las nubes ondulantes son el polvo bajo sus pies.
Nah 1:4 Él da la orden y los océanos se secan y los ríos desaparecen. Los buenos pastizales de Basán y el Carmelo pierden su verdor, y los frondosos bosques del Líbano se marchitan.
Nah 1:5 Ante la presencia de Dios las montañas se estremecen y las colinas se derriten; la tierra tiembla y sus habitantes son destruidos.
Nah 1:6 ¿Quién podrá quedar en pie ante su ira feroz? ¿Quién podrá sobrevivir ante su furia abrasadora? Su furor arde como el fuego y ante él las montañas se desmenuzan.
Nah 1:7 El SEÑOR es bueno, un refugio seguro cuando llegan dificultades. Él está cerca de los que confían en él.
Nah 1:8 Pero arrasará a sus enemigos con una inundación arrolladora. Él perseguirá a sus enemigos en la oscuridad de la noche.
Nah 1:9 ¿Por qué traman contra el SEÑOR? ¡Él los destruirá de un golpe; no necesitará golpear dos veces!
Nah 1:10 Sus enemigos, enredados como espinos y tambaleantes como borrachos, serán quemados como hierba seca en el campo.
Nah 1:11 ¿Quién es este perverso consejero tuyo que maquina el mal contra el SEÑOR?
Nah 1:12 Esto es lo que dice el SEÑOR: «Aunque los asirios tienen muchos aliados, serán destruidos y desaparecerán. Oh pueblo mío, yo te castigué anteriormente pero no te volveré a castigar.
Nah 1:13 Ahora romperé el yugo de esclavitud de tu cuello y te quitaré las cadenas de la opresión asiria».
Nah 1:14 Esto es lo que dice el SEÑOR acerca de Nínive, la ciudad de los asirios: «No tendrás más hijos para perpetuar tu nombre. Destruiré todos los ídolos en los templos de tus dioses. ¡Estoy preparando una tumba para ti porque eres despreciable!».
Nah 1:15 * ¡Miren! ¡Viene un mensajero sobre las montañas con buenas noticias! Trae un mensaje de paz. Celebra tus festivales, oh pueblo de Judá, y cumple todos tus votos, porque tus enemigos perversos no volverán a invadir tu tierra. ¡Serán destruidos por completo!
Nah 2:1 * Nínive, tu enemigo viene para aplastarte. ¡A las murallas! ¡Vigila los caminos! ¡Prepara tus defensas! ¡Reúne a tus fuerzas armadas!
Nah 2:2 Aunque el destructor arrasó con Judá, el SEÑOR restaurará su honor. A la vid de Israel le arrancaron las ramas, pero él restaurará su esplendor.
Nah 2:3 ¡Los escudos resplandecen rojizos a la luz del sol! ¡Miren los uniformes escarlatas de las valientes tropas! Observen a los deslumbrantes carros de guerra tomar posiciones, sobre ellos se agita un bosque de lanzas.*
Nah 2:4 Los carros de guerra corren con imprudencia por las calles y salvajemente por las plazas; destellan como antorchas y se mueven tan veloces como relámpagos.
Nah 2:5 El rey grita a sus oficiales y ellos tropiezan en su apuro por correr hacia los muros para levantar las defensas.
Nah 2:6 ¡Las compuertas del río se abrieron con violencia! ¡El palacio está a punto de desplomarse!
Nah 2:7 Se decretó el destierro de Nínive y todas las sirvientas lloran su conquista. Gimen como palomas y se golpean el pecho en señal de aflicción.
Nah 2:8 ¡Nínive es como un una represa agrietada que deja escapar a su gente! «¡Deténganse, deténganse!», grita alguien, pero nadie siquiera mira hacia atrás.
Nah 2:9 ¡Roben la plata! ¡Saqueen el oro! Los tesoros de Nínive no tienen fin, su riqueza es incalculable.
Nah 2:10 Pronto la ciudad es saqueada, queda vacía y en ruinas. Los corazones se derriten y tiemblan las rodillas. La gente queda horrorizada, con la cara pálida, temblando de miedo.
Nah 2:11 ¿Dónde está ahora la magnífica Nínive, esa guarida repleta de cachorros de león? Era un lugar donde la gente —como leones con sus cachorros— caminaba libremente y sin temor.
Nah 2:12 El león despedazaba carne para sus cachorros y estrangulaba presas para su leona. Llenaba la guarida de presas y sus cavernas con su botín.
Nah 2:13 «¡Yo soy tu enemigo! —dice el SEÑOR de los Ejércitos Celestiales—. Tus carros de guerra serán quemados; tus jóvenes* morirán en la batalla. Nunca más saquearás las naciones conquistadas. No volverán a oírse las voces de tus orgullosos mensajeros».
Nah 3:1 ¡Qué aflicción le espera a Nínive, la ciudad de crímenes y mentiras! Está saturada de riquezas y nunca le faltan víctimas.
Nah 3:2 ¡Oigan el chasquido de los látigos y el retumbo de las ruedas! Los cascos de los caballos retumban y los carros de guerra traquetean sin control.
Nah 3:3 ¡Miren cómo destellan las espadas y brillan las lanzas cuando pasa la caballería! Hay muertos incontables, hay montones de cadáveres, tantos que la gente tropieza con ellos.
Nah 3:4 Y todo porque Nínive —la ciudad hermosa e incrédula, la amante con encantos mortales— sedujo a las naciones con su belleza. Ella les enseñó toda su magia y hechizó a la gente por todas partes.
Nah 3:5 «¡Yo soy tu enemigo! —dice el SEÑOR de los Ejércitos Celestiales—. Ahora te levantaré la falda y mostraré tu desnudez y tu vergüenza a toda la tierra.
Nah 3:6 Te cubriré con inmundicias y mostraré al mundo lo vil que eres.
Nah 3:7 Todos los que te vean se alejarán de ti y dirán: “Nínive yace en ruinas. ¿Dónde están los que lloran por ella?”. ¿Lamenta alguien tu destrucción?».
Nah 3:8 ¿Acaso eres mejor que la ciudad de Tebas,* situada en el río Nilo y rodeada de agua? Estaba protegida a su alrededor por el río, con el agua por muralla.
Nah 3:9 Etiopía* y la tierra de Egipto le dieron ayuda sin límites. Las naciones de Fut y de Libia estaban entre sus aliados.
Nah 3:10 Sin embargo, Tebas cayó y su gente fue llevada cautiva y sus bebés fueron estrellados contra las piedras de las calles hasta morir. Los soldados tiraban los dados* para quedarse con los oficiales egipcios como sirvientes. Ataron con cadenas a todos sus líderes.
Nah 3:11 Y tú, Nínive, también te tambalearás como un borracho; te esconderás por temor al ataque del enemigo.
Nah 3:12 Todas tus fortalezas se derrumbarán. Serán devoradas como higos maduros que caen en la boca de los que sacuden los árboles.
Nah 3:13 Tus tropas serán tan débiles e indefensas como mujeres. Las puertas de tu país se abrirán de par en par al enemigo, les prenderán fuego y se quemarán.
Nah 3:14 ¡Prepárate para el sitio! ¡Almacena agua! ¡Refuerza las defensas! ¡Métete en los pozos para pisotear el barro y llenar los moldes y hacer ladrillos para reparar los muros!
Nah 3:15 Sin embargo, el fuego te devorará; serás derribada a espada. El enemigo te consumirá como langostas; devorará todo lo que encuentre. Aunque te multipliques como una nube de langostas, no tendrás escapatoria.
Nah 3:16 Tus comerciantes se han multiplicado hasta llegar a ser más numerosos que las estrellas. Pero son como una nube de langostas que despojan la tierra y alzan el vuelo.
Nah 3:17 Tus guardias* y tus oficiales también son como una nube de langostas que se amontona sobre los cercos en un día frío. Pero al igual que las langostas que vuelan cuando sale el sol, todos levantarán el vuelo y desaparecerán.
Nah 3:18 Tus pastores duermen, oh rey asirio, tus príncipes yacen muertos en el polvo. Tu pueblo está disperso por las montañas, sin nadie que lo reúna.
Nah 3:19 Tu herida no tiene remedio tu lesión es mortal. Todos los que se enteren de tu destrucción aplaudirán con alegría. ¿Dónde se puede encontrar a alguien que no haya sufrido tu constante crueldad?

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