LECTURA PARA LA MAÑANA
LUCAS 22:39-46
Luc 22:39 Luego, acompañado por sus discípulos, Jesús salió del cuarto en el piso de arriba y, como de costumbre, fue al monte de los Olivos.
Luc 22:40 Allí les dijo: «Oren para que no cedan a la tentación».
Luc 22:41 Se alejó a una distancia como de un tiro de piedra, se arrodilló y oró:
Luc 22:42 «Padre, si quieres, te pido que quites esta copa de sufrimiento de mí. Sin embargo, quiero que se haga tu voluntad, no la mía».
Luc 22:43 Entonces apareció un ángel del cielo y lo fortaleció.
Luc 22:44 Oró con más fervor, y estaba en tal agonía de espíritu que su sudor caía a tierra como grandes gotas de sangre.*
Luc 22:45 Finalmente se puso de pie y regresó adonde estaban sus discípulos, pero los encontró dormidos, exhaustos por la tristeza.
Luc 22:46 «¿Por qué duermen? —les preguntó —. Levántense y oren para que no cedan ante la tentación».
Luc 22:40 Allí les dijo: «Oren para que no cedan a la tentación».
Luc 22:41 Se alejó a una distancia como de un tiro de piedra, se arrodilló y oró:
Luc 22:42 «Padre, si quieres, te pido que quites esta copa de sufrimiento de mí. Sin embargo, quiero que se haga tu voluntad, no la mía».
Luc 22:43 Entonces apareció un ángel del cielo y lo fortaleció.
Luc 22:44 Oró con más fervor, y estaba en tal agonía de espíritu que su sudor caía a tierra como grandes gotas de sangre.*
Luc 22:45 Finalmente se puso de pie y regresó adonde estaban sus discípulos, pero los encontró dormidos, exhaustos por la tristeza.
Luc 22:46 «¿Por qué duermen? —les preguntó —. Levántense y oren para que no cedan ante la tentación».
HEBREOS 6:13-20
Heb 6:13 Por ejemplo, estaba la promesa que Dios le hizo a Abraham. Como no existía nadie superior a Dios por quién jurar, Dios juró por su propio nombre, diciendo:
Heb 6:14 «Ciertamente te bendeciré y multiplicaré tu descendencia hasta que sea incontable»*.
Heb 6:15 Entonces Abraham esperó con paciencia y recibió lo que Dios le había prometido.
Heb 6:16 Ahora bien, cuando las personas hacen un juramento, invocan a alguien superior a ellas para obligarse a cumplirlo. Y, no cabe ninguna duda de que ese juramento conlleva una obligación.
Heb 6:17 Dios también se comprometió mediante un juramento, para que los que recibieran la promesa pudieran estar totalmente seguros de que él jamás cambiaría de parecer.
Heb 6:18 Así que Dios ha hecho ambas cosas: la promesa y el juramento. Estas dos cosas no pueden cambiar, porque es imposible que Dios mienta. Por lo tanto, los que hemos acudido a él en busca de refugio podemos estar bien confiados aferrándonos a la esperanza que está delante de nosotros.
Heb 6:19 Esta esperanza es un ancla firme y confiable para el alma; nos conduce a través de la cortina al santuario interior de Dios.
Heb 6:20 Jesús ya entró allí por nosotros. Él ha llegado a ser nuestro eterno Sumo Sacerdote, según el orden de Melquisedec.
Heb 6:14 «Ciertamente te bendeciré y multiplicaré tu descendencia hasta que sea incontable»*.
Heb 6:15 Entonces Abraham esperó con paciencia y recibió lo que Dios le había prometido.
Heb 6:16 Ahora bien, cuando las personas hacen un juramento, invocan a alguien superior a ellas para obligarse a cumplirlo. Y, no cabe ninguna duda de que ese juramento conlleva una obligación.
Heb 6:17 Dios también se comprometió mediante un juramento, para que los que recibieran la promesa pudieran estar totalmente seguros de que él jamás cambiaría de parecer.
Heb 6:18 Así que Dios ha hecho ambas cosas: la promesa y el juramento. Estas dos cosas no pueden cambiar, porque es imposible que Dios mienta. Por lo tanto, los que hemos acudido a él en busca de refugio podemos estar bien confiados aferrándonos a la esperanza que está delante de nosotros.
Heb 6:19 Esta esperanza es un ancla firme y confiable para el alma; nos conduce a través de la cortina al santuario interior de Dios.
Heb 6:20 Jesús ya entró allí por nosotros. Él ha llegado a ser nuestro eterno Sumo Sacerdote, según el orden de Melquisedec.
PROVERBIOS 23:1-8
Pro 23:1 Cuando te sientes a la mesa de un gobernante, fíjate bien en lo que te sirven.
Pro 23:2 Si eres de buen comer, ponle un cuchillo a tu garganta;
Pro 23:3 no desees todos los manjares, porque tal vez tenga la intención de engañarte.
Pro 23:4 No te desgastes tratando de hacerte rico. Sé lo suficientemente sabio para saber cuándo detenerte.
Pro 23:5 Las riquezas desaparecen en un abrir y cerrar de ojos, porque les saldrán alas y se irán volando como las águilas.
Pro 23:6 No aceptes comer con los tacaños ni desees sus manjares.
Pro 23:7 Están siempre pensando cuánto cuesta.* «Come y bebe» te invitan, pero no lo dicen con sinceridad.
Pro 23:8 Vomitarás lo poco que hayas comido, y se desperdiciarán tus cumplidos.
Pro 23:2 Si eres de buen comer, ponle un cuchillo a tu garganta;
Pro 23:3 no desees todos los manjares, porque tal vez tenga la intención de engañarte.
Pro 23:4 No te desgastes tratando de hacerte rico. Sé lo suficientemente sabio para saber cuándo detenerte.
Pro 23:5 Las riquezas desaparecen en un abrir y cerrar de ojos, porque les saldrán alas y se irán volando como las águilas.
Pro 23:6 No aceptes comer con los tacaños ni desees sus manjares.
Pro 23:7 Están siempre pensando cuánto cuesta.* «Come y bebe» te invitan, pero no lo dicen con sinceridad.
Pro 23:8 Vomitarás lo poco que hayas comido, y se desperdiciarán tus cumplidos.
LECTURA PARA LA NOCHE
ISAÍAS 27-28
Isa 27:1 En aquel día, el SEÑOR tomará su espada veloz y terrible para castigar al Leviatán:* la serpiente que se mueve con gran rapidez, la serpiente que se retuerce y se enrolla. Él matará al dragón del mar.
Isa 27:2 «En aquel día, canten acerca del viñedo fértil.
Isa 27:3 Yo, el SEÑOR, lo vigilaré, y lo regaré con cuidado. Día y noche lo vigilaré para que nadie pueda hacerle daño.
Isa 27:4 Mi enojo habrá desaparecido. Si encuentro zarzas y espinos en crecimiento, los atacaré; los quemaré,
Isa 27:5 a menos que vuelvan a mí en busca de ayuda. Que se reconcilien conmigo; sí, que se reconcilien conmigo».
Isa 27:6 Se acerca el tiempo cuando los descendientes de Jacob echarán raíces; ¡Israel brotará y florecerá, y llenará de fruto el mundo entero!
Isa 27:7 ¿Ha golpeado el SEÑOR a Israel como golpeaba a sus enemigos? ¿Lo ha castigado como los castigaba a ellos?
Isa 27:8 No, pero desterró a Israel para que rindiera cuentas; quedó desterrado de su tierra, como si hubiera sido arrasado por una tormenta del oriente.
Isa 27:9 El SEÑOR lo hizo para purificar a Israel* de su perversidad; para quitarle todo su pecado. Como resultado, todos los altares paganos serán reducidos a polvo. No quedará en pie ningún poste dedicado a la diosa Asera ni ningún santuario pagano.
Isa 27:10 Las ciudades fortificadas quedarán en silencio y vacías, las casas estarán abandonadas y las calles cubiertas de mala hierba. Allí pastarán los terneros, masticando ramas y tallos.
Isa 27:11 La gente está como las ramas secas de un árbol, que se arrancan y se usan para encender el fuego debajo de las ollas para cocinar. Israel es una nación tonta y necia, porque sus habitantes se han apartado de Dios. Por lo tanto, aquél que los hizo no les tendrá lástima ni misericordia.
Isa 27:12 Sin embargo, llegará el día cuando el SEÑOR los reunirá como grano seleccionado a mano. Uno por uno los irá reuniendo, desde el río Éufrates* al oriente, hasta el arroyo de Egipto al occidente.
Isa 27:13 En aquel día se tocará la gran trompeta y muchos de los que se morían en el destierro en Asiria y en Egipto regresarán a Jerusalén para adorar al SEÑOR en su monte santo.
Isa 28:1 ¡Qué aflicción le espera a la orgullosa ciudad de Samaria, la corona gloriosa de los borrachos de Israel!* Está asentada a la cabeza de un valle fértil, pero su belleza gloriosa se marchitará como una flor. Es el orgullo de un pueblo que el vino derribó.
Isa 28:2 Pues el Señor enviará un poderoso ejército en su contra; como un potente granizo y una lluvia torrencial, se lanzarán sobre ella como las aguas embravecidas de una inundación y la aplastarán contra el suelo.
Isa 28:3 La orgullosa ciudad de Samaria, la corona gloriosa de los borrachos de Israel,* será pisoteada bajo los pies de sus enemigos.
Isa 28:4 Está asentada a la cabeza de un valle fértil, pero su belleza gloriosa se marchitará como una flor. Cualquiera que la vea la arrancará, como a higo que brota temprano y pronto se arranca y se come.
Isa 28:5 Entonces por fin el SEÑOR de los Ejércitos Celestiales será la corona gloriosa de Israel; será el orgullo y la alegría del remanente de su pueblo.
Isa 28:6 Él dará a sus jueces anhelo de justicia y gran valentía a sus guerreros que vigilan las puertas.
Isa 28:7 Sin embargo, ahora Israel es dirigido por borrachos que dan tumbos por el vino y se tambalean a causa del alcohol. Los sacerdotes y los profetas se tambalean a causa del alcohol, y se pierden por el vino. Dan tumbos cuando tienen visiones y se tambalean cuando emiten sus decisiones.
Isa 28:8 Sus mesas están cubiertas de vómito; hay inmundicia por todas partes.
Isa 28:9 «¿Quién se cree el SEÑOR que somos? —preguntan—, ¿por qué nos habla así? ¿Acaso somos niños pequeños, recién destetados?
Isa 28:10 ¡Una y otra vez nos repite todo, línea por línea, renglón por renglón, un poco aquí y un poco allá!».
Isa 28:11 Así que, ahora, ¡Dios tendrá que hablar a su pueblo por medio de opresores extranjeros que hablan una lengua extraña!
Isa 28:12 Dios le ha dicho a su pueblo: «Aquí hay un lugar de descanso; que reposen aquí los fatigados. Este es un lugar tranquilo para descansar»; pero ellos no quisieron escuchar.
Isa 28:13 Por eso el SEÑOR nuevamente les explicará su mensaje en detalle: línea por línea, renglón por renglón, un poco aquí y un poco allá; para que tropiecen y caigan. Ellos serán heridos, caerán en la trampa y serán capturados.
Isa 28:14 Por lo tanto, escuchen este mensaje del SEÑOR, ustedes, gobernantes burlones de Jerusalén.
Isa 28:15 Se jactan diciendo: «Hemos hecho un trato para burlar a la muerte y hemos llegado a un acuerdo para evitar la tumba.* La destrucción que se aproxima nunca podrá tocarnos, porque nos hemos edificado un fuerte refugio hecho de mentiras y engaños».
Isa 28:16 Por lo tanto, esto dice el SEÑOR Soberano: «¡Miren! Pongo una piedra de cimiento en Jerusalén,* una piedra sólida y probada. Es una preciosa piedra principal sobre la cual se puede construir con seguridad. El que crea jamás será sacudido.*
Isa 28:17 Los probaré con la cuerda de medir de la justicia y con la plomada de la rectitud. Puesto que su refugio está construido de mentiras, un granizo lo echará abajo. Puesto que está hecho de engaños, una inundación lo arrasará.
Isa 28:18 Anularé el trato que ustedes hicieron para burlar a la muerte, y revocaré su acuerdo para evitar la tumba. Cuando el terrible enemigo arrase la tierra, ustedes serán pisoteados.
Isa 28:19 Una y otra vez vendrá esa inundación, mañana tras mañana, día y noche, hasta que arrase con todos ustedes». Este mensaje llenará de terror al pueblo.
Isa 28:20 La cama que ustedes hicieron es demasiado pequeña para acostarse en ella y las mantas son demasiado estrechas para cubrirlos.
Isa 28:21 El SEÑOR vendrá, como lo hizo contra los filisteos en el monte Perazim, y contra los amorreos en Gabaón. Vendrá para hacer algo extraño; vendrá para hacer algo poco común:
Isa 28:22 el Señor, el SEÑOR de los Ejércitos Celestiales, ha dicho con claridad que está decidido a aplastar toda la tierra. Así que no se burlen más, de lo contrario, su castigo será aún mayor.
Isa 28:23 Escúchenme; escuchen y presten mucha atención.
Isa 28:24 ¿Acaso el agricultor siempre ara pero nunca siembra? ¿Está continuamente labrando la tierra y nunca plantando?
Isa 28:25 ¿No siembra finalmente sus semillas —comino negro, comino, trigo, cebada y trigo espelta— cada uno en la forma correcta, y cada uno en el lugar que le corresponde?
Isa 28:26 El agricultor sabe exactamente qué hacer porque Dios le ha dado entendimiento.
Isa 28:27 Nunca se usa un mazo pesado para trillar el comino negro, sino que se golpea con varas livianas. Nunca se pasa una rueda de trillar sobre el comino, al contrario, se golpea suavemente con un mayal.
Isa 28:28 El grano para el pan se muele con facilidad, por eso no lo tritura demasiado. Lo trilla bajo las ruedas de una carreta, pero no lo pulveriza.
Isa 28:29 El SEÑOR de los Ejércitos Celestiales es un maestro maravilloso, y le da gran sabiduría al agricultor.
Isa 27:2 «En aquel día, canten acerca del viñedo fértil.
Isa 27:3 Yo, el SEÑOR, lo vigilaré, y lo regaré con cuidado. Día y noche lo vigilaré para que nadie pueda hacerle daño.
Isa 27:4 Mi enojo habrá desaparecido. Si encuentro zarzas y espinos en crecimiento, los atacaré; los quemaré,
Isa 27:5 a menos que vuelvan a mí en busca de ayuda. Que se reconcilien conmigo; sí, que se reconcilien conmigo».
Isa 27:6 Se acerca el tiempo cuando los descendientes de Jacob echarán raíces; ¡Israel brotará y florecerá, y llenará de fruto el mundo entero!
Isa 27:7 ¿Ha golpeado el SEÑOR a Israel como golpeaba a sus enemigos? ¿Lo ha castigado como los castigaba a ellos?
Isa 27:8 No, pero desterró a Israel para que rindiera cuentas; quedó desterrado de su tierra, como si hubiera sido arrasado por una tormenta del oriente.
Isa 27:9 El SEÑOR lo hizo para purificar a Israel* de su perversidad; para quitarle todo su pecado. Como resultado, todos los altares paganos serán reducidos a polvo. No quedará en pie ningún poste dedicado a la diosa Asera ni ningún santuario pagano.
Isa 27:10 Las ciudades fortificadas quedarán en silencio y vacías, las casas estarán abandonadas y las calles cubiertas de mala hierba. Allí pastarán los terneros, masticando ramas y tallos.
Isa 27:11 La gente está como las ramas secas de un árbol, que se arrancan y se usan para encender el fuego debajo de las ollas para cocinar. Israel es una nación tonta y necia, porque sus habitantes se han apartado de Dios. Por lo tanto, aquél que los hizo no les tendrá lástima ni misericordia.
Isa 27:12 Sin embargo, llegará el día cuando el SEÑOR los reunirá como grano seleccionado a mano. Uno por uno los irá reuniendo, desde el río Éufrates* al oriente, hasta el arroyo de Egipto al occidente.
Isa 27:13 En aquel día se tocará la gran trompeta y muchos de los que se morían en el destierro en Asiria y en Egipto regresarán a Jerusalén para adorar al SEÑOR en su monte santo.
Isa 28:1 ¡Qué aflicción le espera a la orgullosa ciudad de Samaria, la corona gloriosa de los borrachos de Israel!* Está asentada a la cabeza de un valle fértil, pero su belleza gloriosa se marchitará como una flor. Es el orgullo de un pueblo que el vino derribó.
Isa 28:2 Pues el Señor enviará un poderoso ejército en su contra; como un potente granizo y una lluvia torrencial, se lanzarán sobre ella como las aguas embravecidas de una inundación y la aplastarán contra el suelo.
Isa 28:3 La orgullosa ciudad de Samaria, la corona gloriosa de los borrachos de Israel,* será pisoteada bajo los pies de sus enemigos.
Isa 28:4 Está asentada a la cabeza de un valle fértil, pero su belleza gloriosa se marchitará como una flor. Cualquiera que la vea la arrancará, como a higo que brota temprano y pronto se arranca y se come.
Isa 28:5 Entonces por fin el SEÑOR de los Ejércitos Celestiales será la corona gloriosa de Israel; será el orgullo y la alegría del remanente de su pueblo.
Isa 28:6 Él dará a sus jueces anhelo de justicia y gran valentía a sus guerreros que vigilan las puertas.
Isa 28:7 Sin embargo, ahora Israel es dirigido por borrachos que dan tumbos por el vino y se tambalean a causa del alcohol. Los sacerdotes y los profetas se tambalean a causa del alcohol, y se pierden por el vino. Dan tumbos cuando tienen visiones y se tambalean cuando emiten sus decisiones.
Isa 28:8 Sus mesas están cubiertas de vómito; hay inmundicia por todas partes.
Isa 28:9 «¿Quién se cree el SEÑOR que somos? —preguntan—, ¿por qué nos habla así? ¿Acaso somos niños pequeños, recién destetados?
Isa 28:10 ¡Una y otra vez nos repite todo, línea por línea, renglón por renglón, un poco aquí y un poco allá!».
Isa 28:11 Así que, ahora, ¡Dios tendrá que hablar a su pueblo por medio de opresores extranjeros que hablan una lengua extraña!
Isa 28:12 Dios le ha dicho a su pueblo: «Aquí hay un lugar de descanso; que reposen aquí los fatigados. Este es un lugar tranquilo para descansar»; pero ellos no quisieron escuchar.
Isa 28:13 Por eso el SEÑOR nuevamente les explicará su mensaje en detalle: línea por línea, renglón por renglón, un poco aquí y un poco allá; para que tropiecen y caigan. Ellos serán heridos, caerán en la trampa y serán capturados.
Isa 28:14 Por lo tanto, escuchen este mensaje del SEÑOR, ustedes, gobernantes burlones de Jerusalén.
Isa 28:15 Se jactan diciendo: «Hemos hecho un trato para burlar a la muerte y hemos llegado a un acuerdo para evitar la tumba.* La destrucción que se aproxima nunca podrá tocarnos, porque nos hemos edificado un fuerte refugio hecho de mentiras y engaños».
Isa 28:16 Por lo tanto, esto dice el SEÑOR Soberano: «¡Miren! Pongo una piedra de cimiento en Jerusalén,* una piedra sólida y probada. Es una preciosa piedra principal sobre la cual se puede construir con seguridad. El que crea jamás será sacudido.*
Isa 28:17 Los probaré con la cuerda de medir de la justicia y con la plomada de la rectitud. Puesto que su refugio está construido de mentiras, un granizo lo echará abajo. Puesto que está hecho de engaños, una inundación lo arrasará.
Isa 28:18 Anularé el trato que ustedes hicieron para burlar a la muerte, y revocaré su acuerdo para evitar la tumba. Cuando el terrible enemigo arrase la tierra, ustedes serán pisoteados.
Isa 28:19 Una y otra vez vendrá esa inundación, mañana tras mañana, día y noche, hasta que arrase con todos ustedes». Este mensaje llenará de terror al pueblo.
Isa 28:20 La cama que ustedes hicieron es demasiado pequeña para acostarse en ella y las mantas son demasiado estrechas para cubrirlos.
Isa 28:21 El SEÑOR vendrá, como lo hizo contra los filisteos en el monte Perazim, y contra los amorreos en Gabaón. Vendrá para hacer algo extraño; vendrá para hacer algo poco común:
Isa 28:22 el Señor, el SEÑOR de los Ejércitos Celestiales, ha dicho con claridad que está decidido a aplastar toda la tierra. Así que no se burlen más, de lo contrario, su castigo será aún mayor.
Isa 28:23 Escúchenme; escuchen y presten mucha atención.
Isa 28:24 ¿Acaso el agricultor siempre ara pero nunca siembra? ¿Está continuamente labrando la tierra y nunca plantando?
Isa 28:25 ¿No siembra finalmente sus semillas —comino negro, comino, trigo, cebada y trigo espelta— cada uno en la forma correcta, y cada uno en el lugar que le corresponde?
Isa 28:26 El agricultor sabe exactamente qué hacer porque Dios le ha dado entendimiento.
Isa 28:27 Nunca se usa un mazo pesado para trillar el comino negro, sino que se golpea con varas livianas. Nunca se pasa una rueda de trillar sobre el comino, al contrario, se golpea suavemente con un mayal.
Isa 28:28 El grano para el pan se muele con facilidad, por eso no lo tritura demasiado. Lo trilla bajo las ruedas de una carreta, pero no lo pulveriza.
Isa 28:29 El SEÑOR de los Ejércitos Celestiales es un maestro maravilloso, y le da gran sabiduría al agricultor.
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