APOSENTO ALTO

lunes, 19 de febrero de 2018

LECTURA BÍBLICA 19 DE FEBRERO

LECTURA PARA LA MAÑANA

MATEO    18:15-35

Mat 18:15 »Si un creyente* peca contra ti,* háblale en privado y hazle ver su falta. Si te escucha y confiesa el pecado, has recuperado a esa persona.
Mat 18:16 Pero, si no te hace caso, toma a uno o dos más contigo y vuelve a hablarle, para que los dos o tres testigos puedan confirmar todo lo que digas.
Mat 18:17 Si aún así la persona se niega a escuchar, lleva el caso ante la iglesia. Luego, si la persona no acepta la decisión de la iglesia, trata a esa persona como a un pagano o como a un corrupto cobrador de impuestos.
Mat 18:18 »Les digo la verdad, todo lo que prohíban* en la tierra será prohibido en el cielo, y todo lo que permitan* en la tierra será permitido en el cielo.
Mat 18:19 »También les digo lo siguiente: si dos de ustedes se ponen de acuerdo aquí en la tierra con respecto a cualquier cosa que pidan, mi Padre que está en el cielo lo hará.
Mat 18:20 Pues donde se reúnen dos o tres en mi nombre, yo estoy allí entre ellos.
Mat 18:21 Luego Pedro se le acercó y preguntó: —Señor, ¿cuántas veces debo perdonar a alguien* que peca contra mí? ¿Siete veces?
Mat 18:22 —No siete veces —respondió Jesús—, sino setenta veces siete.*
Mat 18:23 »Por lo tanto, el reino del cielo se puede comparar a un rey que decidió poner al día las cuentas con los siervos que le habían pedido prestado dinero.
Mat 18:24 En el proceso, le trajeron a uno de sus deudores que le debía millones de monedas de plata.*
Mat 18:25 No podía pagar, así que su amo ordenó que lo vendieran —junto con su esposa, sus hijos y todo lo que poseía —para pagar la deuda.
Mat 18:26 »Pero el hombre cayó de rodillas ante su amo y le suplicó: “Por favor, tenme paciencia y te lo pagaré todo”.
Mat 18:27 Entonces el amo sintió mucha lástima por él, y lo liberó y le perdonó la deuda.
Mat 18:28 »Pero, cuando el hombre salió de la presencia del rey, fue a buscar a un compañero, también siervo, que le debía unos pocos miles de monedas de plata.* Lo tomó del cuello y le exigió que le pagara de inmediato.
Mat 18:29 »El compañero cayó de rodillas ante él y le rogó que le diera un poco más de tiempo. “Ten paciencia conmigo, y yo te pagaré”, le suplicó.
Mat 18:30 Pero el acreedor no estaba dispuesto a esperar. Hizo arrestar al hombre y lo puso en prisión hasta que pagara toda la deuda.
Mat 18:31 »Cuando algunos de los otros siervos vieron eso, se disgustaron mucho. Fueron ante el rey y le contaron todo lo que había sucedido.
Mat 18:32 Entonces el rey llamó al hombre al que había perdonado y le dijo: “¡Siervo malvado! Te perdoné esa tremenda deuda porque me lo rogaste.
Mat 18:33 ¿No deberías haber tenido compasión de tu compañero así como yo tuve compasión de ti?”.
Mat 18:34 Entonces el rey, enojado, envió al hombre a la prisión para que lo torturaran hasta que pagara toda la deuda.
Mat 18:35 »Eso es lo que les hará mi Padre celestial a ustedes si se niegan a perdonar de corazón a sus hermanos.

HECHOS 25:13-27

Hch 25:13 Unos días más tarde el rey Agripa llegó con su hermana, Berenice,* a presentar sus respetos a Festo.
Hch 25:14 Durante su visita de varios días, Festo conversó con el rey acerca del caso de Pablo. —Aquí hay un prisionero —le dijo —cuyo caso me dejó Félix.
Hch 25:15 Cuando yo estaba en Jerusalén, los sacerdotes principales y los ancianos judíos presentaron cargos en su contra y me pidieron que yo lo condenara.
Hch 25:16 Les hice ver que la ley romana no declara culpable a nadie sin antes tener un juicio. El acusado debe tener una oportunidad para que confronte a sus acusadores y se defienda.
Hch 25:17 »Cuando los acusadores de Pablo llegaron aquí para el juicio, yo no me demoré. Convoqué al tribunal el día siguiente y di órdenes para que trajeran a Pablo.
Hch 25:18 Pero las acusaciones que hicieron en su contra no correspondían a ninguno de los delitos que yo esperaba.
Hch 25:19 En cambio, tenían algo que ver con su religión y con un hombre muerto llamado Jesús, quien —según Pablo —está vivo.
Hch 25:20 No sabía cómo investigar estas cuestiones, así que le pregunté si él estaba dispuesto a ser juzgado por estos cargos en Jerusalén.
Hch 25:21 Pero Pablo apeló al emperador para que resuelva su caso. Así que di órdenes de que lo mantuvieran bajo custodia hasta que yo pudiera hacer los arreglos necesarios para enviarlo al César.
Hch 25:22 —Me gustaría oír personalmente a ese hombre —dijo Agripa. Y Festo respondió: —¡Mañana lo oirá!
Hch 25:23 Así que, al día siguiente, Agripa y Berenice llegaron al auditorio con gran pompa, acompañados por oficiales militares y hombres prominentes de la ciudad. Festo dio órdenes de que trajeran a Pablo.
Hch 25:24 Después Festo dijo: «Rey Agripa y los demás presentes, éste es el hombre a quien todos los judíos tanto aquí como en Jerusalén quieren ver muerto.
Hch 25:25 Pero, en mi opinión, él no ha hecho nada que merezca la muerte. Sin embargo, como apeló al emperador, decidí enviarlo a Roma.
Hch 25:26 »¿Pero qué debo escribirle al emperador?, pues no hay ningún cargo concreto en su contra. Así que lo he traído ante todos ustedes —especialmente ante ti, rey Agripa —para tener algo que escribir después de que lo interroguemos.
Hch 25:27 ¡Pues no tiene sentido enviarle un prisionero al emperador sin especificar los cargos que hay en su contra!


SALMO 41

Sal 41:1 ¡Qué alegría hay para los que tratan bien a los pobres! El SEÑOR los rescata cuando están en apuros.
Sal 41:2 El SEÑOR los protege y los mantiene con vida; los prospera en la tierra y los rescata de sus enemigos.
Sal 41:3 El SEÑOR los atiende cuando están enfermos y les devuelve la salud.
Sal 41:4 «Oh SEÑOR, ten misericordia de mí —pedí en oración—, sáname, porque contra ti he pecado».
Sal 41:5 Pero mis enemigos sólo hablan mal de mí. Preguntan: «¿Falta mucho para que se muera y pase al olvido?».
Sal 41:6 Me visitan como si fueran mis amigos, pero mientras tanto juntan chismes y, cuando se van, los divulgan a los cuatro vientos.
Sal 41:7 Los que me odian susurran cosas acerca de mí y se imaginan lo peor.
Sal 41:8 «Tiene alguna enfermedad fatal —dicen —. ¡Jamás se levantará de la cama!».
Sal 41:9 Hasta mi mejor amigo, en quien tenía plena confianza, quien compartía mi comida, se ha puesto en mi contra.
Sal 41:10 SEÑOR, ten misericordia de mí. ¡Devuélveme la salud para que pueda darles su merecido!
Sal 41:11 Sé que soy de tu agrado, porque no permitiste que mis enemigos triunfaran sobre mí.
Sal 41:12 Has preservado mi vida porque soy inocente; me has traído a tu presencia y eso es para siempre.
Sal 41:13 Alaben al SEÑOR, Dios de Israel, quien vive desde la eternidad hasta la eternidad. ¡Amén y amén!

LECTURA PARA LA NOCHE

LEVÍTICO 11-13

Lev 11:1 Luego el SEÑOR les dijo a Moisés y a Aarón:
Lev 11:2 «Den las siguientes instrucciones al pueblo de Israel: de todos los animales de la tierra, estos son los que puedes usar para alimento:
Lev 11:3 puedes comer cualquier animal rumiante y que tenga las pezuñas totalmente partidas.
Lev 11:4 Sin embargo, no puedes comer los siguientes animales* que tienen las pezuñas partidas o que rumian, pero no ambas cosas. El camello rumia, pero no tiene pezuñas partidas, así que es ceremonialmente impuro para ti.
Lev 11:5 El damán* rumia, pero no tiene pezuñas partidas, por lo tanto es impuro.
Lev 11:6 La liebre rumia, pero no tiene pezuñas partidas, así que es impura.
Lev 11:7 El cerdo tiene pezuñas partidas de manera pareja, pero no rumia, también es impuro.
Lev 11:8 No puedes comer la carne de estos animales, ni siquiera tocar el cadáver. Son ceremonialmente impuros para ti.
Lev 11:9 »De todos los animales que viven en el agua, estos son los que puedes usar como alimento: puedes comer cualquier animal del agua que tenga tanto aletas como escamas, sea que procedan de agua salada o de los arroyos.
Lev 11:10 Sin embargo, nunca comas ningún animal del mar o de los ríos que no tenga aletas y escamas. Son detestables para ti. Esto incluye tanto a las criaturas pequeñas que viven en aguas poco profundas como a todas las criaturas que viven en aguas profundas.
Lev 11:11 Siempre serán detestables para ti. Nunca deberás comer su carne, ni siquiera tocar su cadáver.
Lev 11:12 Todo animal del agua que no tenga tanto aletas como escamas es detestable para ti.
Lev 11:13 »Estas son las aves que son detestables para ti y no deberás comerlas: el buitre grifón, el quebrantahuesos, el buitre de cabeza negra,
Lev 11:14 el milano, los halcones de toda clase,
Lev 11:15 los cuervos de toda clase,
Lev 11:16 el búho real, la lechuza campestre, la gaviota, los gavilanes de toda clase,
Lev 11:17 el búho pequeño, el cuervo marino, el búho grande,
Lev 11:18 la lechuza común, la lechuza del desierto, el buitre egipcio,
Lev 11:19 la cigüeña, la garza de toda clase, la abubilla y el murciélago.
Lev 11:20 »No debes comer insectos alados que caminan por el suelo; son detestables para ti.
Lev 11:21 Sin embargo, puedes comer insectos alados que caminan por el suelo y que tengan articulaciones para poder saltar.
Lev 11:22 Los insectos que se te permite comer incluyen toda clase de langostas, langostones, grillos y saltamontes.
Lev 11:23 Todos los demás insectos alados que caminan sobre el suelo son detestables para ti.
Lev 11:24 »Las siguientes criaturas te harán ceremonialmente impuro; cualquiera que toque el cadáver de uno de esos animales quedará contaminado hasta el anochecer;
Lev 11:25 y si levanta el cadáver deberá lavar su ropa, y quedará contaminado hasta el anochecer:
Lev 11:26 todo animal que tenga pezuñas pero que no estén partidas de manera pareja y que no rumie es impuro para ti. Cualquiera que toque el cadáver de dicho animal quedará contaminado.
Lev 11:27 De los animales que caminan en cuatro patas, los que se apoyan sobre sus plantas son impuros. Cualquiera que toque el cadáver de dicho animal quedará contaminado hasta el anochecer.
Lev 11:28 Si alguien levanta el cadáver, deberá lavar su ropa, y permanecerá contaminado hasta el anochecer. Estos animales son impuros para ti.
Lev 11:29 »De los animales pequeños que corren por el suelo, estos serán impuros para ti: la rata-topo, la rata, los lagartos grandes de toda clase,
Lev 11:30 el geco, el varano, el lagarto común, la lagartija de arena y el camaleón.
Lev 11:31 Todos estos animales pequeños son impuros para ti. Cualquiera que toque el cadáver de dichos animales, quedará contaminado hasta el anochecer.
Lev 11:32 Si alguno de estos animales muere y cae sobre algo, ese objeto será impuro; ya sea un objeto hecho de madera, de tela, de cuero o de tela áspera. Cualquiera que sea su uso, deberá sumergirse en agua, y quedará contaminado hasta el anochecer. Después de esto, quedará ceremonialmente puro y podrá usarse de nuevo.
Lev 11:33 »Si uno de estos animales cae en una olla de barro, todo lo que haya en la olla quedará contaminado, y habrá que romper la olla.
Lev 11:34 Si el agua de dicho recipiente cae sobre cualquier alimento, este quedará contaminado; y cualquier bebida que haya en el recipiente quedará contaminada.
Lev 11:35 Cualquier objeto sobre el que caiga el cadáver de dichos animales quedará contaminado. Si es un horno o un fogón, deberá ser destruido porque está contaminado, y debes tratarlo como tal.
Lev 11:36 »Sin embargo, si el cadáver de uno de estos animales cae en un manantial o en una cisterna, el agua permanecerá pura pero cualquiera que toque el cadáver quedará contaminado.
Lev 11:37 Si el cadáver cae sobre la semilla que será sembrada en el campo, aun así, la semilla será considerada pura;
Lev 11:38 pero si la semilla está húmeda cuando el cadáver cae sobre ella, la semilla quedará contaminada.
Lev 11:39 »Si un animal que te está permitido comer muere, y alguien toca el cadáver, esa persona quedará contaminada hasta el anochecer.
Lev 11:40 Si come de su carne o se lleva el cadáver, deberá lavar su ropa y permanecerá contaminada hasta el anochecer.
Lev 11:41 »Todos los animales pequeños que corren por el suelo son detestables, y nunca deberás comerlos.
Lev 11:42 Esto incluye todos los animales que se deslizan sobre el vientre, como también los de cuatro patas y los de muchas patas. Todos esos animales que corren por el suelo son detestables, y nunca deberás comerlos.
Lev 11:43 No te contamines a ti mismo al tocarlos. No te hagas ceremonialmente impuro a causa de ellos.
Lev 11:44 Pues yo soy el SEÑOR tu Dios. Debes consagrarte y ser santo, porque yo soy santo. Así que no te contamines al tocar cualquiera de estos animales pequeños que corren por el suelo.
Lev 11:45 Pues yo, el SEÑOR, soy quien te sacó de la tierra de Egipto para ser tu Dios; por lo tanto, sé santo porque yo soy santo.
Lev 11:46 »Estas son las instrucciones con respecto a los animales terrestres, las aves, los seres marinos y los animales que corren por el suelo.
Lev 11:47 Mediante estas instrucciones sabrás lo que es impuro y lo que es puro, y también los animales que puedes comer y los que no puedes comer».
Lev 12:1 El SEÑOR le dijo a Moisés: «Da las siguientes instrucciones al pueblo de Israel:
Lev 12:2 si una mujer queda embarazada y da a luz un varón, será ceremonialmente impura por siete días, así como es impura durante su período menstrual.
Lev 12:3 Al octavo día, circunciden el prepucio del niño.
Lev 12:4 Después de esperar treinta y tres días, ella quedará purificada del flujo de sangre del parto. Durante este tiempo de purificación, no debe tocar nada que haya sido consagrado ni tampoco entrar en el santuario hasta que haya terminado su tiempo de purificación.
Lev 12:5 Si una mujer da a luz una hija, quedará ceremonialmente impura durante dos semanas, así como es impura durante su período menstrual. Después de esperar sesenta y seis días, ella quedará purificada del flujo de sangre del parto.
Lev 12:6 »Cuando se cumpla el tiempo de la purificación, ya sea por haber tenido un hijo o una hija, la mujer deberá llevar un cordero de un año como ofrenda quemada y un pichón de paloma o una tórtola como ofrenda de purificación. Deberá llevar sus ofrendas al sacerdote a la entrada del tabernáculo.*
Lev 12:7 Luego el sacerdote las presentará al SEÑOR para purificarla.* Entonces ella volverá a estar ceremonialmente pura después del flujo de sangre del parto. Estas son las instrucciones para una mujer después del nacimiento de un hijo o una hija.
Lev 12:8 »Si a la mujer no le alcanza para comprar un cordero, deberá llevar un par de tórtolas o dos pichones de paloma. Uno será para la ofrenda quemada y el otro para la ofrenda de purificación. El sacerdote los sacrificará para purificarla a ella, y quedará ceremonialmente pura».
Lev 13:1 El SEÑOR les dijo a Moisés y a Aarón:
Lev 13:2 «Si alguien tiene una hinchazón, una erupción o una decoloración de la piel que pueda convertirse en una enfermedad grave de la piel,* esa persona debe ser llevada al sacerdote Aarón, o a uno de sus hijos.*
Lev 13:3 El sacerdote examinará la zona afectada de la piel, y si el vello de la zona afectada se ha vuelto blanco y el problema parece estar más profundo que la piel, esta es una enfermedad cutánea grave, y el sacerdote que la examina debe declarar a la persona ceremonialmente impura.
Lev 13:4 »Sin embargo, si la zona afectada de la piel es sólo una decoloración blanca y no parece estar más profunda que la piel, y si el vello en la mancha no se ha vuelto blanco, el sacerdote pondrá a la persona en cuarentena durante siete días.
Lev 13:5 Al séptimo día el sacerdote la volverá a examinar, y si encuentra que la zona afectada no ha cambiado y que el problema no se ha extendido en la piel, el sacerdote la pondrá en cuarentena por siete días más.
Lev 13:6 Una vez cumplidos los siete días, el sacerdote la examinará de nuevo, y si encuentra que la zona afectada ha disminuido y no se ha extendido, el sacerdote declarará a la persona ceremonialmente pura; era solamente una erupción. Entonces, la persona lavará su ropa y quedará ceremonialmente pura;
Lev 13:7 pero si la erupción continúa extendiéndose después de que la persona fue examinada por el sacerdote y declarada pura, la persona infectada deberá regresar para ser examinada nuevamente.
Lev 13:8 Si el sacerdote encuentra que la erupción se ha extendido, debe declarar a la persona ceremonialmente impura, porque ciertamente es una enfermedad de la piel.
Lev 13:9 »Cualquiera que contrae una enfermedad grave de la piel deberá acudir al sacerdote para ser examinado.
Lev 13:10 Si el sacerdote encuentra una hinchazón blanca en la piel, y el vello en la mancha se ha vuelto blanco y hay una llaga abierta en la zona afectada,
Lev 13:11 es una enfermedad crónica de la piel y el sacerdote deberá declarar a la persona ceremonialmente impura. En tales casos, no es necesario poner a la persona en cuarentena porque es evidente que la piel está contaminada por la enfermedad.
Lev 13:12 »Ahora bien, supongamos que la enfermedad se ha extendido por toda la piel de la persona y cubre todo su cuerpo de pies a cabeza.
Lev 13:13 Cuando el sacerdote examine a la persona infectada y encuentre que la enfermedad cubre todo su cuerpo, la declarará ceremonialmente pura. Dado que la piel se ha vuelto completamente blanca, la persona es pura.
Lev 13:14 Pero si aparecen llagas abiertas, la persona infectada será declarada ceremonialmente impura.
Lev 13:15 El sacerdote deberá hacer esta declaración tan pronto como vea una llaga abierta, ya que las llagas abiertas indican la presencia de una enfermedad de la piel.
Lev 13:16 Sin embargo, si la llagas abiertas sanan y se vuelven blancas como el resto de la piel, la persona deberá regresar al sacerdote
Lev 13:17 para ser examinada de nuevo. Si las zonas afectadas efectivamente se han vuelto blancas, el sacerdote declarará ceremonialmente pura a la persona al decir: “¡Eres pura!”.
Lev 13:18 »Si alguien tiene una llaga purulenta en la piel que ha empezado a sanar,
Lev 13:19 pero en el mismo sitio aparece una hinchazón blanca o una mancha blanca rojiza, la persona deberá acudir al sacerdote para que la examine.
Lev 13:20 Si el sacerdote, al examinarla, ve que el problema está más profundo que la piel y si el vello en el área afectada se ha vuelto blanco, el sacerdote deberá declarar a la persona ceremonialmente impura; la llaga purulenta se ha convertido en una enfermedad grave de la piel.
Lev 13:21 Sin embargo, si el sacerdote no encuentra vello blanco en la zona afectada y ve que el problema no parece estar más profundo que la piel y ha ido disminuyendo, el sacerdote deberá poner a la persona en cuarentena por siete días.
Lev 13:22 Si durante ese tiempo el mal del área afectada se extiende por la piel, el sacerdote deberá declarar a la persona ceremonialmente impura, porque es una enfermedad grave;
Lev 13:23 pero si la zona afectada no crece ni se extiende, es simplemente la cicatriz de la llaga, y el sacerdote declarará a la persona ceremonialmente pura.
Lev 13:24 »Si alguien sufre una quemadura en la piel y la zona quemada cambia de color, poniéndose blanca rojiza o blanca brillante,
Lev 13:25 el sacerdote deberá examinarla. Si encuentra que el vello en la zona afectada se ha vuelto blanco y que el problema parece estar más profundo que la piel, entonces ha surgido en la quemadura una enfermedad de la piel. El sacerdote deberá declarar a la persona ceremonialmente impura, porque sin duda se trata de una enfermedad grave de la piel.
Lev 13:26 Sin embargo, si el sacerdote no encuentra vello blanco en la zona afectada y ve que el problema no parece estar más profundo que la piel y ha disminuido, el sacerdote deberá poner a la persona en cuarentena por siete días.
Lev 13:27 Al séptimo día, el sacerdote deberá examinarla de nuevo. Si la zona afectada se ha extendido en la piel, el sacerdote deberá declarar a la persona ceremonialmente impura, porque es sin duda una enfermedad grave de la piel;
Lev 13:28 pero si la zona afectada no ha cambiado ni se ha extendido por la piel, sino que ha disminuido, es simplemente una hinchazón causada por la quemadura. Luego el sacerdote declarará a la persona ceremonialmente pura, porque es simplemente la cicatriz de la quemadura.
Lev 13:29 »Si alguien, sea hombre o mujer, tiene una llaga en la cabeza o en la barbilla,
Lev 13:30 el sacerdote deberá examinar la llaga. Si encuentra que está más profunda que la piel y contiene vello delgado y amarillo, el sacerdote deberá declarar a la persona ceremonialmente impura. Se trata de una llaga costrosa en la cabeza o en la barbilla.
Lev 13:31 Si el sacerdote, al examinar la llaga costrosa, encuentra que no está más profunda que la piel, pero no tiene vello negro, deberá poner a la persona en cuarentena por siete días.
Lev 13:32 Cumplidos los siete días, el sacerdote deberá examinar la llaga de nuevo. Si encuentra que la llaga costrosa no se ha extendido y que no contiene vello amarillo y que no parece estar más profunda que la piel,
Lev 13:33 la persona deberá afeitarse totalmente, con excepción de la zona afectada. Luego el sacerdote deberá poner a la persona en cuarentena durante otros siete días.
Lev 13:34 Al séptimo día examinará la llaga de nuevo. Si no se ha extendido y no parece estar más profunda que la piel, el sacerdote declarará a la persona ceremonialmente pura. Entonces la persona lavará su ropa y quedará ceremonialmente pura.
Lev 13:35 Sin embargo, si la llaga costrosa empieza a extenderse después de haber sido declarada pura,
Lev 13:36 el sacerdote deberá examinarla de nuevo. Si encuentra que la llaga se ha extendido, no hace falta que el sacerdote busque el vello amarillo; la persona infectada quedará ceremonialmente impura.
Lev 13:37 Pero si el color de la llaga costrosa no ha cambiado y ha crecido el vello negro, la llaga se ha curado. Entonces el sacerdote declarará a la persona ceremonialmente pura.
Lev 13:38 »Si alguien, sea hombre o mujer, tiene manchas blancas brillantes en la piel,
Lev 13:39 el sacerdote deberá examinar la zona afectada. Si descubre que las manchas brillantes son de un tono blanco opaco, no es nada más que una erupción de la piel, y la persona quedará ceremonialmente pura.
Lev 13:40 »Si a un hombre se le cae el cabello y queda calvo, sigue ceremonialmente puro.
Lev 13:41 Si pierde el cabello de la frente, y simplemente quedó calvo de la frente; sigue siendo puro.
Lev 13:42 Sin embargo, si aparece una llaga de color blanco rojizo en la zona calva, sea de la parte superior o posterior de la cabeza, es una enfermedad de la piel.
Lev 13:43 El sacerdote deberá examinarlo, y si descubre hinchazón alrededor de la llaga blanca rojiza, en cualquier parte de la cabeza del hombre, y tiene la apariencia de una enfermedad de la piel,
Lev 13:44 el hombre ciertamente está infectado con una enfermedad de la piel y es impuro. Entonces el sacerdote deberá declararlo ceremonialmente impuro debido a la llaga de la cabeza.
Lev 13:45 »Los que sufran de una enfermedad grave de la piel deberán rasgar su ropa y dejar su cabello sin peinar.* Tienen que cubrirse la boca y gritar: “¡Impuro! ¡Impuro!”.
Lev 13:46 Permanecerán ceremonialmente impuros todo el tiempo que les dure esa enfermedad grave, y deberán vivir aislados en un lugar fuera del campamento.
Lev 13:47 »Ahora, supongamos que el moho* contamina alguna prenda de vestir de lana o de lino,
Lev 13:48 alguna tela de lana o de lino, la piel de un animal o cualquier objeto hecho de cuero.
Lev 13:49 Si la zona afectada de la ropa, de la piel del animal, de la tela o del artículo de cuero se ha vuelto verdosa o rojiza, está contaminada de moho y tendrá que ser mostrada al sacerdote.
Lev 13:50 Después de haber examinado la parte afectada, el sacerdote pondrá el artículo en cuarentena por siete días.
Lev 13:51 Al séptimo día el sacerdote lo examinará de nuevo. Si la zona afectada se ha extendido, la ropa o la tela o el cuero sin ninguna duda está contaminado de un moho grave y queda ceremonialmente impuro.
Lev 13:52 El sacerdote deberá quemar el objeto —la prenda de vestir, la tela de lana o de lino o el artículo de cuero— pues ha sido contaminado con un moho grave. Tendrá que ser totalmente destruido por fuego.
Lev 13:53 »Si, al examinarlo de nuevo, el sacerdote descubre que la zona contaminada no se ha extendido en la prenda de vestir, en la tela o en el cuero,
Lev 13:54 ordenará que se lave el objeto y luego lo pondrá en cuarentena durante otros siete días.
Lev 13:55 Entonces el sacerdote lo examinará otra vez. Si ve que la zona afectada no ha cambiado de color después de haber sido lavado, aunque no se haya extendido, el objeto está contaminado. Tendrá que quemarlo por completo, sin importar si la mancha* está por dentro o por fuera.
Lev 13:56 Sin embargo, si el sacerdote lo examina después de haber sido lavado y ve que la zona afectada se ha desteñido, entonces cortará esa parte de la prenda de vestir, de la tela o del cuero.
Lev 13:57 Si la mancha reaparece en la prenda de vestir, en la tela o en el artículo de cuero, es evidente que el moho está extendiéndose, y el objeto contaminado tendrá que ser quemado;
Lev 13:58 pero si la mancha desaparece de la ropa, de la tela o del artículo de cuero después de haber sido lavado, este se debe lavar nuevamente; y entonces quedará ceremonialmente puro.
Lev 13:59 »Estas son las instrucciones acerca de cómo tratar con el moho que contamina una prenda de vestir de lana o de lino, o tela o cualquier objeto hecho de cuero. Esta es la manera en que el sacerdote determinará si estos artículos son ceremonialmente puros o impuros».

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